Editorial de Cantabria24horas.com

LA IMPUTACIÃ“N DE MAS MUESTRA EL ERROR DE JUDICIALIZAR UN CONFLICTO POLÃTICO

"Cuando un problema polÃtico se judicializa, aumenta el peligro de que la incapacidad de encauzarlo con sensatez amplifique la mecha del conflicto planteado". Una vez aceptada a trÃ¡mite la querella instada desde la fiscalÃa contra el presidente de la Generalitat y dos colaboradoras, "algÃºn dÃa tenÃa que llegar el momento de llamar a Mas y esa fase se produce en un momento polÃticamente inoportuno". El contencioso "no se puede dejar solo ni principalmente en manos de juristas". El Gobierno "lleva demasiados meses retranqueado tras una lÃnea de defensa genÃ©rica de la ConstituciÃ³n y de la ley, lo cual le ha llevado a rechazar todas y cada una de las iniciativas de la Generalitat, sin plantear alternativa alguna" el desafÃo de la instituciÃ³n presidida por Mas "exigÃa tanto una condena polÃtica contundente como una respuesta creativa y pragmÃ¡tica". En este momento de debilidad, el efecto de la imputaciÃ³n del president en funciones "es un balÃ³n de oxÃgeno para quien, en caso de ser condenado, quedarÃa inhabilitado para el ejercicio de cargo pÃºblico". Aunque tambiÃ©n configure su candidatura como una propuesta todavÃa mÃ¡s problemÃ¡tica.

"Si alguien pretendÃa hacer entrar a Mas en el martirologio por la independencia de CataluÃ±a, estÃ¡ en condiciones de lograr su objetivo". El porquÃ© de ese manejo de los tiempos - la querella de Mas ha permanecido nueve meses en barbecho - no lo han explicado los jueces, ni siquiera la fiscalÃa. "Con indiferencia total hacia la separaciÃ³n de poderes y sin guardar siquiera las apariencias, ha sido el ministro de Justicia, Rafael CatalÃ¡, el que ha atribuido al TSJC la intenciÃ³n de haber aguardado a la celebraciÃ³n de las elecciones". A la torpeza general de judicializar la polÃtica se aÃ±ade asÃ la del poder ejecutivo entrometiÃ©ndose donde no le corresponde, en el contexto de una querella forzada desde el Gobierno, detonante de la dimisiÃ³n del entonces fiscal del Estado, Eduardo Torres- Dulce. "Torpeza tras torpeza".

EL PAÃS 10. Editorial

EL TSJC HA CUMPLIDO CON SU OBLIGACIÃ“N A PESAR DE LA FUERTE PRESIÃ“N POLÃTICA DE LOS NACIONALISTAS

La reacciÃ³n de los nacionalistas a la imputaciÃ³n de Artur Mas es "sencillamente patÃ©tica y corrobora que los independentistas se creen legitimados para burlar las leyes y negarse a acatar los procedimientos judiciales y las sentencias, como han venido haciendo con absoluta impunidad". El TSJC "ha cumplido con su obligaciÃ³n a pesar de la fuerte presiÃ³n polÃtica ejercida por los nacionalistas, que seguramente van a poner en marcha una estrategia para presentar a Artur Mas como un mÃ¡rtir de su causa". Por otro lado, conforme pasan las horas, "Mas es un cadÃ¡ver polÃtico y lo que estamos empezando a ver es cÃ³mo Oriol Junqueras y RaÃ¼l Romeva se disputan el cargo de presidente de la Generalitat". Todo indica que uno de los dos presidirÃ¡ el nuevo Gobierno, que va a dar un giro espectacular hacia la izquierda, como exigen la CUP y las propias bases de ERC. Mas "ha sido nefasto, pero los que vienen podrÃan ser peores".

EL MUNDO 3. Editorial

MAS, CITA OBLIGADA CON LA JUSTICIA

Artur Mas "no estÃ¡ hoy mÃ¡s imputado que el 23 de diciembre de 2014, cuando el TSJC acordÃ³ investigar a Mas y al resto de querellados".- Visto el tiempo transcurrido, "el Ãºnico reproche que merecerÃa la actuaciÃ³n judicial es que se ha retrasado de forma exagerada". Las crÃticas del nacionalismo "vuelven a dar la medida de lo que entiende por respeto a la ley y al Estado de derecho". Lo mÃ¡s grave es que los socialistas catalanes hayan secundado este coro de descalificaciones a la decisiÃ³n del TSJC., calificando la imputaciÃ³n de "polÃtica". "No ha faltado la estÃ©tica del martirio, al recordar que la declaraciÃ³n coincidirÃ¡ con el 70 aniversario del fusilamiento de Lluis Companys. Estas reacciones crispadas del nacionalismo catalÃ¡n "fuerzan a preguntarse quÃ© se puede dialogar con guerras polÃticas que desprecian la ley y deslegitiman la Justicia". "No es dialogable la impunidad de una autoridad pÃºblica que burla la ley y utiliza fondos pÃºblicos para financiarla".

ABC 4. Editorial

BUSCAR SOLUCIONES JUDICIALES PARA ASUNTOS POLÃTICOS ES UN ERROR DE BASE QUE NO AUGURA BUENOS RESULTADOS

La noticia "cayÃ³ como una piedra en un lago al que previamente se han lanzado otras: causÃ³ nuevas ondas sobre una superficie ya agitada". CatalÃ¡ "quiso disipar sospechas de intencionalidad polÃtica diciendo que no se imputÃ³ antes a Mas para no interferir en la campaÃ±a del 27-S. una manera, acaso involuntaria, de admitir que los ritmos de la justicia son influenciables". En CataluÃ±a, las fuerzas independentistas "hallaron municiÃ³n para su argumentario polÃtico". La inclinaciÃ³n a buscar soluciones judiciales para asuntos polÃticos "constituye un error de base, que raramente augura buenos resultados". Ninguno de los caminos, ni el elegido por el Gobierno central ni el escogido por el Govern, "nos parece el mÃ¡s pertinente". La polÃtica es diÃ¡logo, negociaciÃ³n y pacto. "SÃ³lo por ese camino se puede llegar a soluciones aceptables por las partes y satisfactorias para la ciudadanÃa".

LA VANGUARDIA 30. Editorial

OTRO PASO EQUIVOCADO

"No deja de sorprender que en estos dÃas en los que Mas lo tiene muy complicado para revalidar la presidencia ante la negativa de la CUP a facilitarlo, la justicia le conceda el beneficio de la persecuciÃ³n, dando a los anticapitalistas un argumento parta respaldarle. Y es una lamentable coincidencia que sea citado por un tribunal el 15 de octubre, el dÃa en que se cumplirÃ¡n 75 aÃ±os del fusilamiento de Companys". Se ha puesto en marcha una maquinaria judicial que tiene unos pasos muy medidos. "ResultarÃa muy difÃcil imaginar cÃ³mo justificarÃa EspaÃ±a ante el club de democracias al que pertenece las hipotÃ©ticas penas de prisiÃ³n o inhabilitaciÃ³n pÃºblica de un cargo electo por el delito de poner urnas testimoniales".

EL PERIÃ“DICO 12. Editorial

ARTUR MAS DEBE RESPONDER ANTE LA JUSTICIA

Calificar de "juicio polÃtico" a la resoluciÃ³n del TSJC es un menosprecio a nuestras leyes y una grave irresponsabilidad. Entrar en esta deriva no sÃ³lo sirve para alimentar la estrategia nacionalista de la persecuciÃ³n polÃtica y el martirologio, sino que busca distraer la verdadera cuestiÃ³n en litigio: que el llamado "proceso de participaciÃ³n" fue suspendido por el Tribunal Constitucional. Que Mas haya dado reiteradas muestras de desobedecer las leyes no le exime de cumplirlas. "De ser asÃ sÃ³lo cabe la actuaciÃ³n del Estado de derecho en defensa propia y asumir todas las responsabilidades". El presidente de la Generalitat se enfrenta ahora a la ley que tanto y tan ufanamente ha despreciado.

LA RAZON 3. Editorial

Truman (M. JABOIS. EL PAÃS 2) Artur Mas. "Nunca un culpable necesitÃ³ de tanto victimismo y nunca sus enemigos trabajaron tanto para satisfacerlo".

Fracturas (J.I. TORREBLANCA. EL PAÃS 2) "CataluÃ±a se parece cada vez mÃ¡s a una sociedad dividida en dos en la que la mayorÃa no resuelve sino que agrava las fracturas".

Fantasmada judicial (F. J. LOSANTOS. EL MUNDO 2) CatalÃ¡ aclarÃ³ que "para no estigmatizar al `presunto delincuente "prevarigalupÃ³" antes y tambiÃ©n despuÃ©s del 27-S. En este Gobierno no cabe un margallo mÃ¡s".

Cambio de liebres (A. LUCAS. EL MUNDO 2) Rajoy es un coloso triste y Mas un seÃ±or repetitivo que cada vez que anticipa urnas pierde un saco de votos.

Â¿Qui prodest? (C.G. ABADILLO. EL MUNDO 8) La decisiÃ³n del TSJC le ha caÃdo al presidente de la Generalitat como llovida del cielo.

SÃ³lo son los aspavientos de siempre (V. PREGO. EL MUNDO 10)

Terceras vÃas (S. GONZÃLEZ. EL MUNDO 14) "Cualquier concesiÃ³n les estimularÃ¡ el apetito en vez de calmarles y les fortalecerÃ¡ para el prÃ³ximo intento".

La demostraciÃ³n (I. CAMACHO. ABC 15) "El subconsciente de Junqueras ha desnudado la verdad: el soberanismo no trata tanto de huir de EspaÃ±a como de su justicia".

Mas es gafe (S. SOSTRES. ABC 19)

El antifaz de la justicia (M. CAROL. LA VANGUARDIA 2)

Y ADEMÃSâ€¦

Seguridad para proteger la libertad (M. RAJOY. EL MUNDO 1,6) "La entrada en vigor de la Ley de Seguridad Nacional es una excelente noticia para todos". La Seguridad Nacional se erige en PolÃtica de Estado. Esta ley constituye un "inÃ©dito ejercicio de transparencia y acercamiento de la seguridad nacional tanto a la sociedad en general como a sus representantes en las Cortes Generales" y regula un vacÃo normativo: las llamadas situaciones de interÃ©s para la seguridad nacional, en las que sin verse afectados los derechos fundamentales y las libertades pÃºblicas, se precisa de una cooperaciÃ³n reforzada de todos los instrumentos del Estado.
El PP necesita rearmarse de cara a diciembre (ABC 4. Editorial) El PP debe profundizar en su ideario y valores tradicionales, aquellos que le llevaron a ser un partido de gobierno reconocible y preferido por la mayorÃa de los espaÃ±oles. Sin complejos.
El aldabonazo de Aznar (E. JULIANA. LA VANGUARDIA 27) Avisa a los suyos de que se hallan en serio peligro de perder las elecciones generales.
A Rajoy no le preocupa Aznar, sino SÃ¡nchez (C. VALENZUELA. ABC 24)
La confusiÃ³n de Ciudadanos (LA RAZÃ“N 3. Suelto) Rivera debe aclarar su polÃtica de alianzas y decidirse para no confundir a electorado.
PSOE: solo existe la naciÃ³n espaÃ±ola (LA RAZÃ“N 3. Suelto)
Hay que invertir en alta velocidad pero con sensatez (EL MUNDO 3. Suelto) Abandonar ahora los proyectos en fase de construcciÃ³n de nuevas lÃneas del AVE "serÃa un error difÃcil de explicar". Pero despuÃ©s habrÃ¡ que analizar si esta es la mejor alternativa para mejorar las conexiones de determinadas ciudades.
La red de AVE como gran operaciÃ³n de Estado (LA RAZÃ“N 3. Editorial) Con apuestas de futuro como el AVE, por encima de banderÃas polÃticas, es como avanza un paÃs y se consolida la convivencia en libertad.
Prestige, Ãºltimo esfuerzo en busca de responsables (EL MUNDO 3. Suelto) El desastre no se produjo por causas imprevisibles. Hay responsables. Pero "resultarÃ¡ casi imposible encontrar a alguien que pague si se logra desenmaraÃ±ar esta tupida madeja".
Barcelona se prepara para acoger refugiados (EL PERIÃ“DICO 12. Editorial) La necesaria coordinaciÃ³n entre instituciones debe estar a la altura de la solidaridad ciudadana.
La desinflaciÃ³n, motor del consumo (CINCO DÃAS 16. Editorial) "Debe proseguir la desindexaciÃ³n de la economÃa para que todo coste adicional estÃ© financiado por la productividad y no daÃ±e la renta de los particulares ni frene la recuperaciÃ³n de la demanda".
Ajuste pendiente del gasto pÃºblico (EL ECONOMISTA 3. Editorial) Siete meses han bastado para que las autonomÃas superen el lÃmite de dÃ©ficit fijado para el conjunto del ejercicio.
Demasiado humo (EL PAÃS 10. Editorial) Volkswagen "no parece haber hecho los deberes en lo que a transparencia se refiere". Toca exigir toda la informaciÃ³n a la empresa e iniciar las investigaciones que sean necesarias para aclarar cÃ³mo el fraude tambiÃ©n alcanzÃ³ grandes dimensiones en EspaÃ±a sin que saltara ninguna alarma.
Calma ante el "escÃ¡ndalo VW" (EL ECONOMISTA 3. Suelto) A pesar de su gravedad, el escÃ¡ndalo no cuestiona la seguridad de los coches.
El sector constructor muestra su fortaleza (EL ECONOMISTA 3. Suelto)
Amazon irrumpe en las despensas (CINCO DÃAS 16. Editorial)
Hay que reforzar Maastricht (J. WEIDMANN, presidente del Deutsche Bundesbank. EL PAÃS 12) "Para fortalecer el marco regulatorio hay que establecer reglas claras para el caso de una posible insolvencia de Estados