Editorial de Cantabria24horas.com

INICIAR LA REFORMA CONSTITUCIONAL ES CLAVE PARA DESBLOQUEAR LA POLÃTICA

La aceptaciÃ³n por el Gobierno de iniciar la reforma constitucional es una buena noticia que ayudarÃ¡ a deshacer nudos que atascan la vida polÃtica. Lo realista serÃ¡ combinar el grado de ambiciÃ³n suficiente con el nivel de consenso conseguible. Un buen punto de partida serÃa una reforma corta, en la que los retoques versarÃan sobre la cuestiÃ³n territorial, la reforma del Senado en un sentido federal, la mejor recepciÃ³n del proceso de construcciÃ³n europea y la supresiÃ³n de la preferencia del varÃ³n a la mujer en el orden sucesorio. A cambio se podrÃan facilitar sucesivos cambios, como el blindaje de los derechos sociales, el sistema electoral o la laicidad, que deben concitar amplias mayorÃas. Es probable que antes de culminar la reforma deba encauzarse la cuestiÃ³n catalana con un pacto, vÃa estatutaria, vÃa relectura parcial de la Ley Fundamental, o con una disposiciÃ³n adicional especÃfica.

EL PAÃS 12. Editorial

PUIGDEMONT DEBE FRENAR PARA QUE NO SE APLIQUE EL 155

Puigdemont debe frenar y responder no al requerimiento de Rajoy, para volver al marco legal y rebajar la tensiÃ³n. No parece que vaya a hacerlo, lo que forzarÃ¡ al Gobierno a recurrir al artÃculo 155 de la ConstituciÃ³n. Esto no liquidarÃa el autogobierno sino que lo garantizarÃa restituyendo el orden constitucional; siempre pensando en elecciones autonÃ³micas. Puigdemont debe aprovechar la oportunidad que le ha dado el Estado y volver a la legalidad. Cada dÃa se evidencia mÃ¡s la monstruosidad de Estado que implantarÃan Puirdemont y la CUP si pusieran en marcha su repÃºblica catalana, ya que quieren controlar a los jueces que investiguen los hechos del 1-O. Dudamos de que los catalanes quieran vivir en un rÃ©gimen en el que sus dirigentes controlen, coaccionen y sometan a los jueces.

EL MUNDO 3. Editorial

PATRIOTISMO ESPAÃ‘OL FRENTE A SEPARATISMO CATALÃN

La agresiÃ³n separatista en CataluÃ±a estÃ¡ produciendo el beneficio de reencontrar a los espaÃ±oles con su sentimiento patriÃ³tico. La puesta de la unidad en peligro y el discurso de Felipe VI contra el secesionismo catalÃ¡n han catalizado la expresiÃ³n pÃºblica de una autÃ©ntica identidad polÃtica. Por fin, la bandera, el himno y la ConstituciÃ³n son para la inmensa mayorÃa de los ciudadanos los signos de la EspaÃ±a actual, moderna, democrÃ¡tica, unida y heredera de la historia comÃºn de la gran naciÃ³n que es. Los catalanes han conseguido que los espaÃ±oles se perciban como lo que son, ciudadanos europeos, miembros de un Estado perfectible, pero social y de Derecho. El impulso que ha tomado la conciencia nacional espaÃ±ola es, sin duda, el gran acontecimiento que se alza entre tanta destrucciÃ³n moral del separatismo.

ABC 4. Editorial

PUIGDEMONT ESTÃ YA EN LA CUENTA ATRÃS PARA UNA RECTIFICACIÃ“N

Puigdemont tiene en su mano rectificar y volver al marco constitucional. Lo que pueda ocurrir en el futuro con la convivencia, la estabilidad institucional y el autogobierno de CataluÃ±a depende de que el presidente de la Generalitat recupere algo del sentido comÃºn necesario para volver a la Ley. La entera responsabilidad del abismo en que se encuentra y de la crÃtica situaciÃ³n de CataluÃ±a es enteramente suya. De ello tendrÃ¡ que responder en el corto plazo, pero lo que es seguro es que serÃ¡ condenado por la Historia. Puigdemont estÃ¡ a 24 horas de responder al requerimiento del Gobierno. En estos Ãºltimos dÃas la tensiÃ³n se ha disparado en el movimiento secesionista y hay en Ã©l fracturas que se pueden tornar en enfrentamientos. Ya nada es monolÃtico y es posible que la refriega le pase una dura factura al independentismo

Los partidos constitucionalistas deben mantener su unidad

La situaciÃ³n en CataluÃ±a ha requerido actuar con precauciÃ³n desde el Gobierno, con toda la Ley y sin ninguna medida excepcional. Rajoy ha respondido con prudencia a las provocaciones de la Generalitat y ha buscado ante todo la unidad de las fuerzas constitucionalistas. Ante los momentos excepcionales que estamos viviendo hay que mantener una unidad que no divida al paÃs. De esta crisis podemos extraer que el electorado ha comprendido que la defensa de la democracia es ahora lo fundamental. Por eso, se explica que Cs y su lÃder, Albert Rivera, sean los que mÃ¡s suben en intenciÃ³n de voto, segÃºn el sondeo de NC Report. El PP es penalizado con un descenso con el que paga, como es lÃ³gico, las decisiones tomadas para impedir el referÃ©ndum del 1-O. El PSOE tambiÃ©n cae, aunque Unidos Podemos es el mÃ¡s castigado por el apoyo de Iglesias a la consulta ilegal. El votante opta por reforzar el constitucionalismo. El proceso independentista deberÃa servir para que exista un nuevo constitucionalismo.

LA RAZÃ“N 3. Editorial

LOS INDEPENDENTISTAS QUIEREN AGUDIZAR EL CONFLICTO

La CUP, la ANC y ERC presionan a Puigdemont para que anule la suspensiÃ³n de la independencia. Pero si algo no debe hacer ahora el president es tensar mÃ¡s la cuerda. Estamos atrapados en una deriva infernal que puede conducir a enfrentamientos indeseables. La situaciÃ³n es muy delicada. Lo que de veras buscan los que animan a activar la independencia es agudizar el conflicto. Es no dejar al Estado otro remedio que aplicar el artÃculo 155. Es propiciar el cuanto peor, mejor. Es desplazar el conflicto de parlamentos y despachos a la calle. Puigdemont es sin duda consciente de todo ello. Como lo son la mayorÃa de los catalanes que valoran la convivencia como un preciado patrimonio comÃºn. La independencia no justificarÃa un enfrentamiento entre catalanes. Nadie comprenderÃa que para hacer un paÃs mejor lo empeorÃ¡ramos hasta ese extremo. No nos lo podemos permitir.

LA VANGUARDIA 32

LA REFORMA CONSTITUCIONAL ES UNA OPORTUNIDAD PARA RECTIFICAR

La voluntad polÃtica de Pedro SÃ¡nchez ha conseguido finalmente que se hayan puesto las bases para iniciar en el plazo de seis meses una subcomisiÃ³n de reforma constitucional en el Congreso. Todo ello estÃ¡ supeditado lÃ³gicamente a la respuesta que dÃ© Puigdemont al requerimiento del Gobierno, previo a la aplicaciÃ³n del artÃculo 155. SerÃa imposible abordar un debate constitucional con una comunidad intervenida. Esta incipiente reforma constitucional es para casi todos los implicados una posibilidad de desandar lo mal andado. Si la sensatez se impone en la respuesta del presidente de la Generalitat, el camino no serÃ¡ fÃ¡cil, pero cualquier idea debe poder ser debatida dentro de la ley. Y el debate hoy ha de ser abierto, no cÃ³mo durante aÃ±os propugnÃ³ el PP exigiendo acordar el final de la reforma antes de empezarla. Todos han de acudir a ella asumiendo riesgos y explicando claramente sus posiciones.

EL PERIÃ“DICO 12. Editorial

Pareja de ocasiÃ³n para despuÃ©s de un golpe (Francisco Rosell EL MUNDO 2) Rajoy y SÃ¡nchez forman ahora extraÃ±a pareja de baile, empujados ambos por el nivel del envite independentista y, de paso, para segarle la hierba electoral a Rivera.

Una mirada 40 aÃ±os atrÃ¡s (MÃ rius Carol LA VANGUARDIA 2) La capacidad de negociaciÃ³n y pacto demostrada hace 40 aÃ±os por Tarradellas son mÃ¡s actuales que nunca ante el momento que le toca vivir a CataluÃ±a.

El final de la escapada (Enric HernÃ¡ndez EL PERIÃ“DICO 13) Puigdemont deberÃ¡ despejar las dudas: o cede a las presiones extremistas e iza la bandera de la desobediencia, a costa de arriar la del autogobierno, o dinamita el frente independentista y convoca elecciones.

Esperando a Fudgemont (Josep Borrell EL PERIÃ“DICO 10) El ex ministro socialista acusa a Puigdemont de falsear la realidad y le pide que convoque elecciones "si le queda un Ã¡pice de responsabilidad".

SÃ o no (Arcadi Espada EL MUNDO 19) MaÃ±ana acaba para el nacionalismo la Ã©poca fÃ©rtil de la ambigÃ¼edad. Han de contestar ahora al requerimiento binario y final.

Independencia de ida y vuelta (J. MarÃa Carrascal ABC 16) Rajoy quiere que Puigdemont se retrate para que se vea que ha engaÃ±ado al Gobierno, al pueblo catalÃ¡n y a sus socios.

El dÃa D de Puigdemont (Xavier Vidal-Folch EL PAÃS 26) President, ignore a Junqueras y a la CUP y convoque elecciones como le aconseja Artur Mas. No aÃ±ada mÃ¡s ruina a los catalanes.

La respuesta de Puigdemont (Lola GarcÃa LA VANGUARDIA 19) La presiÃ³n que sufre por parte de radicales y moderados hace difÃcil de prever quÃ© responderÃ¡ Puigdemont al Gobierno.

Catalunya bajo una autocracia (J. Antonio Zarzalejos LA VANGUARDIA 38) Puigdemont puede responder al Gobierno convocando elecciones, devolviendo la voz a la sociedad catalana.

La catarsis (Herman Tertsch ABC 14) Urge enmendar el terrible error de Rajoy de no intervenir la autonomÃa catalana.

El 155 por pendÃ³n (Cristina LÃ³pez Schlinchting LA RAZÃ“N 4) Para desmontar el desafÃo independentista no es precios el 155, basta que los jueces apliquen la ley.

La soledad de Mariano (Alfonso Rojo LA RAZÃ“N 2) Un presidente de un Estado democrÃ¡tico no puede permitir que en una parte de su territorio se normalice la ilegalidad sistemÃ¡tica.

Podemos paga muy caro su apoyo al procÃ©s (A los Cuatro Vientos ABC 16) El discurso filonacionalista de Iglesias y su seguidismo de Colau estÃ¡ teniendo su coste en los sondeos.

Y ADEMÃSâ€¦

Afrontar la sequÃa (EL PAÃS 12 Editorial) Afrontar la sequÃa desde la responsabilidad de Estado debe ser una obligaciÃ³n prioritaria para el Gobierno, comunidades y oposiciÃ³n.
Un respiro de liquidez (Puntazos LA RAZÃ“N 2) En medio de la incertidumbre econÃ³mica creada por el desafÃo independentista catalÃ¡n, el anuncio de que el BCE prorroga su polÃtica de estÃmulos es una noticia alentadora.
El Brexit encalla (ABC 4 Editorial) La UE debe demostrar unidad en la negociaciÃ³n del Brexit, al tiempo que deja claro a Reino Unido que su salida tendrÃ¡ consecuencias.