Editorial de Cantabria24horas.com

LOS REPRESENTANTES POLÃTICOS NO PUEDEN ARROJAR LOS PROBLEMAS A LAS CALLES

LOS REPRESENTANTES POLÃTICOS NO PUEDEN ARROJAR LOS PROBLEMAS A LAS CALLES "El Partido Popular y Ciudadanos han convocado este domingo una manifestaciÃ³n en favor de la unidad de EspaÃ±a a la que tambiÃ©n se ha sumado Vox. El objetivo Ãºltimo declarado por los convocantes va mÃ¡s allÃ¡ del lema, y se concreta en lograr mediante la presiÃ³n de la calle que el presidente del Gobierno se vaya y llame a elecciones generales de inmediato". "Son muchos los ciudadanos preocupados por el secesionismo catalÃ¡n y por las Ãºltimas decisiones del Gobierno, asÃ como por la inestabilidad polÃtica que ha marcado la legislatura". "Pero el hecho de que el PP y Cs prefieran recurrir a una movilizaciÃ³n antes que a una iniciativa parlamentaria, y, ademÃ¡s, a una movilizaciÃ³n convocada bajo un lema diferente del objetivo que dicen perseguir abiertamente, demuestra hasta quÃ© punto los lÃderes de ambas fuerzas degradan el principio de la integridad territorial a la condiciÃ³n de reclamo partidista, al tiempo que conceden igual valor a las instituciones y a las calles". "Un deber inequÃvoco exigirÃa que quienes ejercen la representaciÃ³n polÃtica no arrojen los problemas a las calles, intentando resolverlos mediante el mandato recibido de los ciudadanos en las urnas. No ha sido esa la opciÃ³n de los convocantes, que han preferido devolver el mandato a los ciudadanos convocÃ¡ndolos a elegir entre banderas". EL PAÃS 10. Editorial EL CRÃ‰DITO POLÃTICO DE PEDRO SÃNCHEZ ESTÃ CALCINADO "La manifestaciÃ³n del domingo ya ha obrado un primer milagro: que el Gobierno de Pedro SÃ¡nchez imposte firmeza ante la intransigencia de los independentistas y se levante de repente de la mesa de negociaciÃ³n entre grandes aspavientos". "Sucede que ya estamos todos muy cansados de la sobreactuaciÃ³n del sanchismo: sus repliegues tÃ¡cticos ya no engaÃ±an a nadie. Esos separatistas de los que ahora Carmen Calvo afirma distanciarse porque no aceptan el marco constitucional -Â¿pero es que lo aceptaban 48 horas antes, seÃ±ora vicepresidenta?- son los mismos que llevaron a SÃ¡nchez a la Moncloa; son los mismos de los que dependen sus Presupuestos, que no fueron concebidos para el beneficio de todos los ciudadanos sino para comprar con nuevos privilegios la voluntad de los desleales; y son los mismos a los que sigue necesitando para optar a una investidura". "SÃ¡nchez no puede seguir abusando de nuestra paciencia, arrastrÃ¡ndose por lo que queda de legislatura sin reconocer su agotamiento y desmintiendo la promesa de MarÃa JesÃºs Montero de no gobernar sin Presupuestos". "O aÃºn peor, cediendo a la extorsiÃ³n separatista y empeÃ±ando la dignidad de nuestras instituciones como moneda de cambio para aprobar sus cuentas y prorrogar asÃ a cualquier precio su pÃrrica estancia en La Moncloa". EL MUNDO 3. Editorial UN GOBIERNO PIRÃ“MANO "La marcha atrÃ¡s del Gobierno de Pedro SÃ¡nchez al plan de negociaciÃ³n con el separatismo catalÃ¡n responde a una necesidad, casi agÃ³nica, de frenar la crisis interna del PSOE y el previsible gran impacto de la manifestaciÃ³n convocada para maÃ±ana en la madrileÃ±a Plaza de ColÃ³n". "Afirmar ahora, como hizo ayer la vicepresidenta Calvo, que no se puede ir a una mesa para hablar de autodeterminaciÃ³n, cuando Quim Torra lo hizo sin cortapisa alguna en su visita a La Moncloa en julio del pasado aÃ±o, suena a excusa improvisada". "El escÃ¡ndalo provocado por la aceptaciÃ³n inicial de la agenda nacionalista -la figura del relator y la mesa de partidos- ha hecho que el Gobierno recule, pero nada garantiza que sea de forma definitiva". "SÃ¡nchez toma oxÃgeno por unos dÃas, aplaca las iras de su partido, busca desinflar la movilizaciÃ³n de la derecha y confÃa en que el separatismo lo mantenga como un mal menor frente a la mayorÃa de cambio que ganÃ³ en AndalucÃa". "Pedro SÃ¡nchez ha incendiado el PSOE y la opiniÃ³n pÃºblica con la propuesta del "relator" de las negociaciones con la Generalitat y los partidos secesionistas. Es la manÃa del pirÃ³mano, que luego quiere ser creÃble como bombero. Ni como bombero, ni como presidente del Gobierno. Pedro SÃ¡nchez carece de la dignidad polÃtica necesaria para ostentar la presidencia del Gobierno de EspaÃ±a. ABC 4. Editorial UNA NEGOCIACIÃ“N QUE YA SE DA POR ROTA "La vicepresidenta del Gobierno compareciÃ³ ayer ante la prensa para dar por rota la negociaciÃ³n con los soberanistas catalanes". "Con el semblante grave, Calvo lamentÃ³ que los esfuerzos gubernamentales para mantener abierta la vÃa del diÃ¡logo no hayan dado mejores frutos. Y proyectÃ³ esta ruptura hacia el terreno de sus consecuencias, afirmando que "el tiempo de la legislatura se acorta". En efecto, si al fin no progresan los presupuestos, la cuenta atrÃ¡s se habrÃ¡ iniciado para el Gobierno de Pedro SÃ¡nchez". "El desarrollo de los acontecimientos permite inferir que tal voluntad de diÃ¡logo ha topado con obstÃ¡culos poco menos que insalvables. No sÃ³lo por la insuficiente cintura de las partes". "Todo indica que, en esta tesitura, el Gobierno ha dicho "hasta aquÃ hemos llegado". "Enfrentado a un soberanismo cuyas demandas no encajan en la ConstituciÃ³n, criticado rudamente por los partidos de la oposiciÃ³n derechista y sometido al fuego procedente de las propias filas, ocasiÃ³n de comprobar en Madrid, una vez mÃ¡s, que la oferta negociadora de la derecha no serÃ¡, ni de lejos, mÃ¡s generosa que la de SÃ¡nchez". LA VANGUARDIA 22. Editorial EL FRACASO DEL DIÃLOGO "El diÃ¡logo entre el Gobierno de Pedro SÃ¡nchez y la Generalitat ha "encallado", por usar la palabra que ha utilizado la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo". "Fracasado tal vez serÃa la palabra adecuada, ya que esa es la sensaciÃ³n que transmitÃa en la rueda de prensa Calvo, rostro de un Gobierno atrapado en el fuego cruzado de una oposiciÃ³n desleal e irresponsable y de unos independentistas catalanes que plantearon la negociaciÃ³n en unos tÃ©rminos -el derecho a la autodeterminaciÃ³n plasmado en un referÃ©ndum y la intervenciÃ³n gubernamental en el proceso judicial a los lÃderes del "procÃ©s"- sobre los que ni este Gobierno espaÃ±ol ni cualquier otro puede negociar". "Durante aÃ±os se ha acusado al Gobierno de inacciÃ³n respecto al conflicto catalÃ¡n". "La llegada de SÃ¡nchez a la Moncloa abriÃ³ una nueva fase. Por primera vez en aÃ±os, Catalunya tenÃa en Madrid un Gobierno dispuesto a negociar tanto el dÃa a dÃa autonÃ³mico (mediante las comisiones bilaterales) como la crisis catalana entendida como un conflicto polÃtico". "El lÃmite, como no podÃa ser de otra manera, era el marco constitucional y estatutario". "Este Gobierno, lo Ãºnico que ha recibido por parte de los partidos independentistas es dos enmiendas a la totalidad a los Presupuestos, la exigencia de unas condiciones inaceptables y todo tipo de gestos provocadores y desplantes". EL PERIÃ“DICO 8. Editorial HAY QUE MANIFESTARSE MÃS QUE NUNCA "La, cuando menos, incÃ³moda sensaciÃ³n de que el Gobierno que rige los destinos de la naciÃ³n va a la deriva, arrastrado por su pacto con los nacionalismos radicales y la extrema izquierda, tomÃ³ ayer cuerpo en el esperpento de la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, en la que la vicepresidenta, Carmen Calvo, teatralizÃ³ la suspensiÃ³n del diÃ¡logo con los separatistas catalanes con una argumentaciÃ³n que supone tomar pro desavisados a los ciudadanos". "Ahora mÃ¡s que nunca, es preciso acudir a la manifestaciÃ³n convocada en Madrid por los principales partidos de la oposiciÃ³n para reclamar, sÃ, el respeto a la soberanÃa nacional y exigir la convocatoria de elecciones, pero, tambiÃ©n, para que el Gobierno reitre un documento vergonzoso, que mantiene vigente, y en el que se articulan mecanismos de diÃ¡logo con los separatistas que degradan nuestro marco constitucional". "No puede llamarse a engaÃ±o quien llegÃ³ al poder de la mano de los mismos partidos que acababan de protagonizar una intenta golpista en CataluÃ±a". "La sociedad espaÃ±ola reclama respeto a sus instituciones y al ordenamiento jurÃdico, y ello pasa necesariamente por una convocatoria electoral. Es lo que van a demandar los ciudadanos este domingo". LA RAZÃ“N 3. Editorial Urge evitar la parÃ¡lisis econÃ³mica (EL ECONOMISTA 3. Editorial) "El Gobierno congelÃ³ su diÃ¡logo con las fuerzas independentistas". "Ante el previsible fracaso de los Presupuestos, la convocatoria de elecciones preservarÃa el impulso que el PIB aÃºn necesita. La opciÃ³n de las elecciones es la mÃ¡s adecuada para evitar que el capital que atesora la economÃa espaÃ±ola se dilapide", Un camino factible hacia la repÃºblica (LA VANGUARDIA 18. Oriol Junqueras) "La sociedad catalana ha empezado un camino que no tiene marcha atrÃ¡s, pero que todavÃa serÃ¡ largo y pesado. ExigirÃ¡ tiempo, habilidad estratÃ©gica y esfuerzo cotidiano. Debilitar el rÃ©gimen del 78 pasa por demostrar a Europa la represiÃ³n que sufrimos y fortalecer el movimiento republicano". "El Estado espaÃ±ol ha demostrado que no estÃ¡ dispuesto a escuchar y reconocer la voluntad democrÃ¡tica de los ciudadanos de CataluÃ±a." Urgencia moral de una alternativa (ABC 3. Jaime Mayor Oreja) "La manifestaciÃ³n de maÃ±ana es un paso adelante, pero no es suficiente. No estamos obligados a seguir el modelo francÃ©s, esto es, Vox no tiene por quÃ© ser el Frente Nacional, ni Ciudadanos tiene que ser Macron. Es un mal modelo para EspaÃ±a". Y ADEMÃSâ€¦ Un flaco favor a la igualdad (LA RAZÃ“N 3. Suelto) Pablo Iglesias ha compartido la baja por el nacimiento de sus hijos con su pareja. Pero en varias ocasiones ha dejado su retiro temporal para coger las riendas del partido". Aumenta la violencia de gÃ©nero (LA VANGUARDIA 22. Editorial) El fiasco de la renta bÃ¡sica (LA RAZÃ“N 3. Suelto) Preocupante escasez de mossos (EL PERIÃ“DICO 8. Suelto) El dividendo debe valorarse a largo plazo (EL ECONOMISTA 3. Suelto) Un mercado de telecos con un futuro abierto, pero cada vez mÃ¡s reÃ±ido (CINCO DÃAS 2. Editorial) Un relato que desborda al consejo de Dia (EL ECONOMISTA 3. Editorial) El Banco de Inglaterra tambiÃ©n avisa a May (ABC 4. Editorial) Impunidad e inmunidad (EL PAÃS 10. Editorial) El asesinato del periodista saudÃ Jamal Khashoggi.