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REPROBACIÓN GENERAL DE LA PROPUESTA DE VOX SOBRE LEGALIZAR ARMAS PARA LA AUTODEFENSA

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LEEMOS EN LA VANGUARDIA “No queremos parecernos a EEUU en el aspecto del uso de armas; es insensato, un retroceso” y supone “imitar lo peor de otros países”. El Gobierno de Pedro Sánchez no ha tenido problemas para reprobar la idea del líder de Vox, Santiago Abascal , de cambiar la ley para permitir que “los españoles de bien” puedan disponer de armas en casa destinadas a la autodefensa. Pero la propuesta también ha recibido la censura por parte del PP, que ya se ha apresurado a marcar distancias con la formación de ultraderecha al considerar que, si bien con Vox puede haber puntos coincidentes en la manera de luchar contra la delincuencia, “proponer que los españoles llevemos pistola por la calle, no”. La portavoz del gobierno, Isabel Celaá, ha señalado en una entrevista matutina en Las Mañanas de RNE que la propuesta de Abascal es algo “muy insensato” y que va en contra de lo que hacen en el mundo civilizado. En este sentido, ha hecho referencia al último atentado terrorista cometido en Nueva Zelanda, en el que un supremacista blanco acabó con la vida de 50 personas, y puso como ejemplo la iniciativa de la primera ministra del país, Jacinda Ardern, que tiene previsto sacar adelante una ley que limitará el acceso a armas de fuego, una ley que aún no se ha aprobado y que está en trámite de debate. “No queremos parecernos a EEUU en el aspecto del uso de armas; es insensato, un retroceso” y supone “imitar lo peor de otros países” ISABEL CELAÁ Ministra de Educación y portavoz del Gobierno La censura de Celaá a la propuesta de Abascal coincide con la expresada por el PP este miércoles, aunque el sentido de la misma es significativamente distinta. El vicesecretario de organización de los populares, Javier Maroto, ha expresado las distancia con dicha idea apuntando que este plan es inasumible por mucho que ambas formaciones coincidan en muchas de las fórmulas destinadas a acabar con “la delincuencia, las mafias y la inmigración ilegal”. En un mensaje en Twitter, Maroto ha señalado que “el PP defiende medidas estrictas contra la delincuencia, las mafias y la inmigración ilegal. Y defendemos a la policia y la guardia civil. Incluso defendemos la presión permanente revisable para delitos muy graves. Pero proponer que los españoles llevemos pistola por la calle, no”. Abascal reclama un “cambio radical urgente en la ley” para que los españoles puedan “disponer de un arma en su casa” que puedan “utilizar en situaciones de amenaza real” para su autodefensa Por su parte, el presidente del PP, Pablo Casado, ha hecho una ligera mención a la polémica señalando que hay quien quiere hablar de llevar armas por la calle y Sánchez sólo quiere hablar de Franco, mientras que “yo quiero hablar de lo que le importa a los españoles”. Abascal reclama un “cambio radical urgente en la ley” para que los españoles puedan “disponer de un arma en su casa” que puedan “utilizar en situaciones de amenaza real” para su autodefensa. La idea fue lanzada este martes en una entrevista concedida a la web armas.es, en la que el dirigente de ultraderecha insistía en la necesidad de “ampliar el concepto de legítima defensa” para que no se produzcan “situaciones injustas” como a su juicio es la condena a dos años y medio de cárcel al anciano que mató al ladrón que asaltó su casa en Tenerife. “La ley está tratando a estas personas como villanos, y a sus asaltantes como víctimas, cosa que también ocurre con los okupas, por cierto. A nosotros esto nos parece dramático”, aseguraba el líder de Vox. La propuesta conllevaría “un cambio radical urgente en la ley, no solo para que los españoles sin antecedentes y en pleno uso de sus facultades mentales puedan disponer de un arma en su casa, sino para que puedan usarla en situaciones de amenaza real para su vida sin tener que enfrentarse a un infierno judicial”. “Vox es el partido del sentido común, y por supuesto que apoyamos el derecho a la autodefensa de los españoles de bien, faltaría más. Por desgracia, tenemos unas leyes que tratan a los delincuentes como víctimas y a los ciudadanos honrados como delincuentes. El español honrado siempre está bajo sospecha”, lamentaba.

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