Editorial de Cantabria24horas.com

LA AYUDA HUMANITARIA NO BASTA PARA IMPEDIR UN GENOCIDIO EN IRAK

Las potencias estÃ¡n respondiendo a la matanza yihadista en Irak con una lentitud, una descoordinaciÃ³n y una indeterminaciÃ³n un tanto irresponsables, si tenemos en cuenta la gravedad de la amenaza mundial que representa el grupo terrorista Estado IslÃ¡mico. El envÃo de ayuda humanitaria no es suficiente. La renuencia europea contrasta con la respuesta de Estados Unidos. Tan sÃ³lo Washington parece consciente de lo que estÃ¡ en juego. MÃ¡s de 2.000 musulmanes radicales extranjeros se han sumado a Estado IslÃ¡mico desde que estallÃ³ la guerra en Siria, pero la ONU se limita a aprobar sanciones econÃ³micas a los paÃses que den cobertura a estos despiadados terroristas. Cabe preguntarse cuÃ¡ntos civiles asesinados, cuÃ¡ntos refugiados, cuÃ¡ntas cÃ©lulas yihadistas desarticuladas en suelo Europeo y cuÃ¡ntos atentados necesita la comunidad internacional para actuar de forma contundente, sin descartar una acciÃ³n militar dirigida por la ONU.

EL MUNDO 3 Editorial

URGE UNA REACCIÃ“N COORDINADA DE OCCIDENTE PARA FRENAR EL YIHADISMO

Se estÃ¡ haciendo urgente una reacciÃ³n coordinada y a largo plazo de los paÃses occidentales ante la evoluciÃ³n de los acontecimientos en el mundo musulmÃ¡n, no solo por el riesgo que representa para la seguridad internacional, sino tambiÃ©n por la grave crisis humanitaria que estÃ¡ produciendo. Sin embargo, la situaciÃ³n se degrada por dÃas en Siria, Irak, incluso Libia, por la coincidencia de unos factores muy concretos. El primero es el desistimiento de Estados Unidos a seguir asumiendo el liderazgo mundial. Obama dejarÃ¡ a su paÃs con una polÃtica exterior en la que es difÃcil reconocer directrices claras. No ha sabido quÃ© hacer en Siria y ahora responde con pusilanimidad en Irak ante el avance del Estado IslÃ¡mico. Sus socios europeos no han reaccionado con mejores actitudes. Por otro lado, las "primaveras Ã¡rabes" se han revelado como un espejismo de democratizaciÃ³n, que ha desembocado en un estado fallido, como es ahora Libia; en un rÃ©gimen autocrÃ¡tico, como Egipto; o, en general, en un exacerbaciÃ³n de los extremismos islamistas. En ese contexto de retracciÃ³n occidental y fracaso democrÃ¡tico, el terrorismo islamista no para de ocupar espacios fÃsicos y polÃticos. Incluso las expectativas de Ã©xito, junto a resultados concretos en Irak y Siria, han desatado la competencia entre grupos terroristas, como Al Qaida y el Estado IslÃ¡mico. Cuanto mÃ¡s grave, cercano y amenazante es el riesgo del terrorismo islamista, menos decidida y disuasoria estÃ¡ siendo la respuesta de las democracias occidentales.

ABC 4 Editorial

OBAMA CARECE DE PROYECTO PARA ORIENTE MEDIO

La servidumbre de vivir atado a la tiranÃa de la encuesta diaria, explica una polÃtica exterior nefasta por puramente egoÃsta, aunque se venda envuelta en buenismo. SÃ³lo asÃ se explica la miopÃa de la Casa Blanca ante los procesos revolucionarios Ã¡rabes y la inconsistencia estratÃ©gica de las retiradas de Irak y AfganistÃ¡n. En Oriente Medio, Obama siempre ha ido a remolque de los acontecimientos, reaccionando a lo inmediato y sin un proyecto. Hoy, Obama bombardea Irak, impone presidentes tÃteres, negocia con IrÃ¡n, respalda dictadores, agita peligrosamente el delicado tablero del KurdistÃ¡n y da bazas dialÃ©cticas a HamÃ¡s frente a Israel. Decisiones impuestas por la urgencia de las circunstancias y la cristalizaciÃ³n de la amenaza yihadista de Al Qaeda y sus adlÃ¡teres. La misma amenaza que un dÃa de primavera soÃ±Ã³ haber conjurado.

LA RAZÃ“N 3 Editorial

LOS MUSULMANES NO EXTREMISTAS DEBEN ALZAR LA VOZ

Si Estados Unidos, con Bush y Obama, no ha tenido un plan claro y coherente para la zona, el yihadismo sÃ lo tiene y lo pone en prÃ¡ctica. En su aspiraciÃ³n de crear un califato hasta el MediterrÃ¡neo ha borrado la frontera que separaba a los sunÃes de Irak y Siria. En su lectura torticera del CorÃ¡n impone el rigorismo y la violencia extrema. Ejerce un control fÃ©rreo sobre la poblaciÃ³n que domina y le garantiza los servicios bÃ¡sicos. Utiliza las tÃ©cnicas de comunicaciÃ³n mÃ¡s modernas junto a la barbarie mÃ¡s arcaica, como demuestran, por poner dos Ãºltimos ejemplos, el asesinato y decapitaciÃ³n de mÃ¡s de 700 personas en menos de dos semanas en el este de Siria o la persecuciÃ³n de los yazidÃs. En su delirio, el Estado IslÃ¡mico estÃ¡ poniendo fin a siglos de convivencia del islam con otras religiones. Mientras los yihadistas avanzaban, en Bagdad los polÃticos daban el deprimente espectÃ¡culo de no ponerse de acuerdo ni siquiera para formar Gobierno. La UE se dispone a facilitar ayuda para combatir al EI, y EEUU, a aumentarla. Pero ademÃ¡s de estas contribuciones, lo que se necesita es un plan coherente para acabar con el yihadismo. Y para ello falta una voz fundamental, que es la de los musulmanes no extremistas, que guardan silencio cuando, ademÃ¡s de ser mayorÃa, son las principales vÃctimas de los delirios de un grupo de fanÃ¡ticos sanguinarios.

EL PERIÃ“DICO 8 Editorial

La fragilidad de un mito (Francisco Marhuenda LA RAZÃ“N 11) Los progres espaÃ±oles recibieron con fervor la llegada de Obama, un presidente que ha sido un incompetente.

Estado IslÃ¡mico, amenaza global (Manuel Coma LA RAZÃ“N 18) El mundo se echa encima de Obama por sus deserciones. Con el Ã©xito de los fanÃ¡ticos no se acaba desde el aire.

La eficacia del terror medieval (Hermann Tertsch ABC 18) los vÃdeos terribles de asesinatos salvajes son grabados por sus propios autores para promocionar su acciÃ³n polÃtica y militar.

Islamismos (Jon Juaristi ABC 10) El nuevo islam del terror globalizado arrasa las formas tradicionales de la vida musulmana valiÃ©ndose de las redes sociales.

LA SANGRIENTA REALIDAD DE UCRANIA DESMIENTE LAS SUPUESTAS BUENAS INTENCIONES DE PUTIN

La negociaciÃ³n y la diplomacia parecen haber sucumbido en el conflicto de Ucrania a la mÃ¡s cruda propaganda y a una guerra de declaraciones. En menos de 48 horas, Kiev ha denunciado la incursiÃ³n nocturna de blindados rusos en su territorio, que MoscÃº ha desmentido como "fantasÃa". En ese mismo tiempo, la OTAN ha seÃ±alado una nueva concentraciÃ³n de tropas y armamento pesado en el lado ruso de la frontera. Ni el dato es una fantasÃa ni lo son las simultÃ¡neas advertencias de la UE al Kremlin sobre el costo de otra violaciÃ³n de la soberanÃa de Ucrania, y de Merkel directamente a Putin para que deje de introducir hombres y armas en el paÃs vecino. Entre la dimisiÃ³n de la diplomacia y el apogeo de la propaganda, Ucrania se ha instalado en una rutina de muertes en la que por primera vez Kiev contempla la posibilidad de ganar terreno a los insurgentes prorrusos. Putin declaraba esta semana en la anexionada Crimea que MoscÃº harÃ¡ lo posible para que el conflicto de Ucrania acabe lo antes posible. La abrumadora realidad es que de la mano del presidente ruso Ucrania se ha convertido en un paÃs en guerra. Y que incluso si las tropas del Kremlin no cruzan la frontera, la brecha entre Rusia y Occidente serÃ¡ probablemente tan duradera como lo sea la preferencia de Putin por su designio neoimperial frente a la coexistencia civilizada.

EL PAÃS 26 Editorial

Y ADEMÃSâ€¦

Un preocupante ascenso de los defensores de la violencia (EL MUNDO 3 Editorial) la presencia en las instituciones de organizaciones como Bildu puede ser una explicaciÃ³n para el hecho que se haya duplicado el nÃºmero de jÃ³venes partidarios de la violencia.
La ETV avanza su desprecio a Felipe VI (LA RAZÃ“N 3 Puntazos) SÃ³lo durante los cuatro aÃ±os de gobierno de Patxi LÃ³pez se emitiÃ³ el tradicional discurso de Nochebuena del Rey. Barinaga, sin embargo, quiere seguir la tradiciÃ³n del PNV en "su" TV de partido.
Ante la Diada, CiU quiere salvar los muebles(LA RAZÃ“N 3 Puntazos) La crisis y el estÃ©ril envite soberanista han provocado que los ciudadanos apuesten por "menos secesiÃ³n y mÃ¡s financiaciÃ³n". El escÃ¡ndalo Pujol ha acabado por hacer entrar en barrena a Mas y sus ensoÃ±aciones.
En los dÃas del gran engaÃ±o(Santos JuliÃ¡ EL PAÃS 29) Culto, leÃdo, dotado para la retÃ³rica, dueÃ±o de voluntades, Pujol ha sido el constructor de un gran relato, fuente de legitimaciÃ³n de un poder absoluto que ha resultado que operaba a la manera de clanes y mafias.
Merkel peregrina (Curri Valenzuela ABC 32) Rajoy tiene que conseguir de la alemana apoyo suficiente para aumentar el peso de EspaÃ±a en las instituciones europeas, a cambio de lo cual apoyÃ³ el nombramiento de Juncker como presidente de la ComisiÃ³n.
Sondeos justificados (EL PAÃS 26 Editorial) La exploraciÃ³n de petrÃ³leo en aguas canarias es defendible, aunque quizÃ¡ ha fallado la polÃtica.
Romper relaciones (IÃ±aki Ezkerra ABC 11) Paulino Rivero no sabe que en ese petrÃ³leo al que le hace asquitos reside la verdadera autonomÃa de su autonomÃa.
DespropÃ³sito sobre las jubilaciones anticipadas (EL PERIÃ“DICO 8 Editorial) Nadie ignora que el sistema pÃºblico de pensiones estÃ¡ debilitado y amenazado a medio plazo, pero su sostenibilidad depende en gran medida de que se cree empleo suficiente y de calidad, no del ahorro con un recorte de derechos de trabajadores que han cotizado 40 aÃ±os.
Siete aÃ±os despuÃ©s (LA VANGUARDIA 24 Editorial) El abrupto estancamiento de la economÃa europea, conocido esta semana, junto con el retroceso del producto interior bruto de JapÃ³n y de Rusia, demuestran que aÃºn no se ha podido establecer un crecimiento estable al unÃsono en las principales Ã¡reas econÃ³micas del planeta.
Incertidumbre en Brasil (LA VANGUARDIA 24 Editorial) Quienes conocen bien la polÃtica brasileÃ±a coinciden en que la muerte de Campos supone, ademÃ¡s de la pÃ©rdida de un polÃtico de peso, la introducciÃ³n de un factor de incertidumbre.
Los valores cristianos son tambiÃ©n valores universales (EL MUNDO 3 Editorial) Los mensajes del Papa llamando a la paz, tolerancia religiosa y polÃtica y a la defensa de los valores cristianos, tienen mÃ¡s sentido que nunca.