Editorial de Cantabria24horas.com

LA LUCHA CONTRA EL TERRORISMO TIENE QUE RESPETAR EL ESTADO DE DERECHO

ES NECESARIO UN PACTO DE ESTADO EN DEFENSA DE LA SEGURIDAD

Mariano Rajoy ha expresado con claridad la filosofÃa que inspira la nueva lÃnea de defensa frente al llamado "terrorismo del siglo XXI": "Hemos decidido vivir sin miedo". En eso, desgraciadamente, la sociedad espaÃ±ola tiene experiencia porque ha sufrido el "terrorismo del siglo XX". Por lo tanto, la apuesta del presidente del Gobierno es a favor de la libertad. Y, claro estÃ¡, a favor de la seguridad. Sin embargo, aduciendo ahora que puede afectar a algunos derechos, los socialistas han amagado con no suscribir en su totalidad el pacto de Estado para hacer frente al terrorismo islamista. En estos momentos, es necesario un PSOE responsable que no actÃºe ni por criterios ideolÃ³gicos, supuestamente progresistas y todavÃa inspirados en la finiquitada Alianza de Civilizaciones, ni electorales. EstÃ¡ en juego nuestra seguridad y nuestra libertad.

LA RAZÃ“N 3. Editorial

LA LUCHA CONTRA EL TERRORISMO TIENE QUE RESPETAR EL ESTADO DE DERECHO

EspaÃ±a cuenta con la suficiente experiencia en la lucha contra el terrorismo como para saber que las libertades del conjunto de la poblaciÃ³n deben mantenerse al tiempo que se identifica, vigila y neutraliza a los terroristas. Aceptar la generalizaciÃ³n del miedo al terrorismo islamista serÃa peor que tomar decisiones encaminadas a mejorar la seguridad. La condiciÃ³n en la lucha contra el yihadismo es que las medidas que se adopten no desemboquen en un estado de excepciÃ³n encubierto, ni que se facilite la construcciÃ³n de mecanismos de vigilancia de comunicaciones que puedan usarse para robar informaciÃ³n de personas, empresas o Gobiernos. Cada medida restrictiva de la libertad debe estar encuadrada estrictamente en el Estado de derecho.

EL PAÃS 36. Editorial

LA COMUNIDAD MUSULMANA DEBE CONDENAR LOS ASESINATOS COMETIDOS EN NOMBRE DE SU DIOS

La primera tarea, y mÃ¡s urgente, para combatir el auge del islamismo radical es la policial, pues es evidente que los grupos terroristas tienen desplegados en Europa elementos dedicados a agredir a sus ciudadanos y terminar con su civilizaciÃ³n. Paralelamente, es precisa una labor sociolÃ³gica para mejorar la integraciÃ³n de los colectivos musulmanes. Las comunidades musulmanes han de ser las primeras interesadas en extirpar a los radicales de sus filas y en condenar con contundencia los asesinatos cometidos en nombre de su dios. No se trata solo de evitar episodios de islamofobia y odio en las calles europeas, sino de demostrar al mundo que la comunidad musulmana no justifica ni remotamente un solo crimen yihadista. En eso Occidente exige que su condena sea nÃtida.

ABC 4. Editorial

Los musulmanes en CataluÃ±a(EL PERIÃ“DICO 8. Editorial) La opiniÃ³n pÃºblica exige a la comunidad musulmana que se pronuncie en contra de los atentados de Francia, como si tuviera algo que ver.

Una frontera o un coladero(EL MUNDO 2. Editorial) La informaciÃ³n que hoy publica EL MUNDO sobre la situaciÃ³n del paso fronterizo entre Marruecos y Ceuta debe servir de llamada de atenciÃ³n a las autoridades espaÃ±olas y europeas. Es una contradicciÃ³n que mientras toda Europa refuerza las medidas de seguridad por la amenaza yihadista, haya tal desbarajuste en un Ã¡rea que puede ser utilizada como puerta de entrada al continente.

Defender la libertad(Francisco Marhuenda. LA RAZÃ“N 11) La izquierda espaÃ±ola se equivoca al pensar que los derechos humanos y las libertades se defienden en plan FlowerPower.

Error papal(Santiago GonzÃ¡lez. EL MUNDO 2) El Papa Francisco se equivoca al equiparar los ataques yihadistas de Francia y las ofensas a la fe.

El perdÃ³n (Manuel Hidalgo. EL MUNDO 18) El Papa ha incurrido en un error doctrinal, teolÃ³gico, si nos atenemos al mensaje evangÃ©lico de perdonar a quienes nos ofenden.

La segunda generaciÃ³n (J. MarÃa Carrascal. ABC 16) La guerra contra el yihadismo va a ser mÃ¡s larga y difÃcil de ganar que todas las guerras anteriores.

SÃ©samo(Ignacio Camacho. ABC 15) Sociedades abiertas pero enfermas de etnocentrismo solo reconocen la amenaza cuando afecta a su confortable estabilidad.

IdolatrÃas(Jon Juaristi. ABC 14) Resulta absurdo aprovechar la coyuntura para exigir una movilizaciÃ³n intelectual contra las religiones.

PODEMOS SE HA ALIMENTADO DE LOS ERRORES Y CARENCIAS DE PP Y PSOE

Un aÃ±o despuÃ©s de que Pablo Iglesias presentarÃ¡ la candidatura de Podemos a las elecciones europea, lo que ha quedado claro es que no son "cuatro frikis", como los definiÃ³ Pedro Arriola. El ascenso meteÃ³rico de Podemos hay que buscarlo en su astucia para detectar los profundos cambios que se han producido en nuestra sociedad. El desapego hacia la polÃtica, alimentado por la corrupciÃ³n y el agotamiento de las instituciones de la TransiciÃ³n, ha generado una tierra de nadie a cuya conquista se lanzaron Pablo Iglesias y su equipo de platÃ³ en platÃ³. Supieron esbozar un programa y un mensaje tan populistas como dÃºctiles. Luego suplantaron la dinÃ¡mica asamblearia por el culto al lÃder y el control vertical de la organizaciÃ³n. A Podemos se le puede criticar por sus muchas incoherencias, por su demagogia y porque sus propuestas impedirÃan la salida de la crisis. Pero de lo que no cabe duda es de que comunicados como el que ayer emitiÃ³ el PP para valorar el caso GÃ¼rtel, insistiendo en que el tiempo les darÃ¡ la razÃ³n y entonces habrÃ¡ que pedirles perdÃ³n, ayudan a Pablo Iglesias. Otro tanto cabe decir de los problemas que manifiesta Pedro SÃ¡nchez para ejercer el liderazgo en el PSOE. De este tipo de errores y carencias se alimenta un partido que en un aÃ±o ha cambiado el mapa polÃtico.

EL MUNDO 2. Editorial

Pablo Iglesias se extralimita en Sevilla(LA RAZÃ“N 3. Puntazos) El lÃder de Podemos dio una clase magistral de soberbia polÃtica en su primer discurso como secretario general de Podemos en AndalucÃa.

EL PP DEBE PRESTAR MÃS ATENCIÃ“N A SUS VOTANTES TRADICIONALES

El sondeo electoral que hoy publica ABC, ademÃ¡s de concluir que el PP serÃa la fuerza mÃ¡s votada si las generales se celebrasen hoy, confirma el auge de Podemos, que desbanca al PSOE como segundo partido nacional. La remontada que debe proponerse el PP es posible, pero tiene obstÃ¡culos, que pueden ser superados con una combinaciÃ³n de estrategias de comunicaciÃ³n mÃ¡s acertadas y resultados mÃ¡s perceptibles en la mejora de las economÃas familiares. Parece evidente que los populares tendrÃ¡n que prestar mÃ¡s atenciÃ³n a sus votantes tradicionales, porque las concesiones al apaciguamiento con la izquierda, como en la reforma del aborto, no les ha sumado votos sino todo lo contrario. El exceso de autosatisfacciÃ³n en el PP y la desatenciÃ³n a su electorado le estÃ¡n pasando factura. La encuesta no hace justicia a su gestiÃ³n para salir de la crisis econÃ³mica, pero la culpa no es de los encuestados.

ABC 4. Editorial

Y ADEMÃSâ€¦

DecepciÃ³n en Canarias (EL PAÃS 36. Editorial) El Gobierno central y el canario han gestionado mal el sondeo petrolÃfero en aguas de las islas.
SÃ¡nchez o la importancia del manejo del GPS socialista (C. GarcÃa-Abadillo. EL MUNDO 3) Su despiste al perderse por causa del GPS serÃa una anÃ©cdota si no fuera porque en el PSOE hay quienes piensan que la nave de Ferraz va a la deriva si sigue pilotada por Ã©l.
Duran Lleida frente al radicalismo separatista (LA RAZÃ“N 3. Puntazos) El adelanto electoral en CataluÃ±a, bajo un planteamiento exclusivamente rupturista, es totalmente opuesto a las intenciones y deseos del lÃder de UDC.
Todo a cambio de nada (Salvador Sostres. EL MUNDO 19) Entre una CiU que no quiere separarse y una EspaÃ±a que no puede dejar escapar a CatluÃ±a, acabarÃ¡ habiendo un acuerdo, como siempre lo ha habido.
Sun Tzu no gastaba barretina (Francisco Pascual. EL MUNDO 19) El motor que ha propulsado el independentismo catalÃ¡n ha sido el descontento social hacia los polÃticos por la crisis y la lucha por la supervivencia del partido hegemÃ³nico.
A una semana de las elecciones griegas (EL PERIÃ“DICO 8. Editorial)Cuando falta una semana para las elecciones griegas, las alarmas ante una posible victoria de Syriza continÃºan encendidas en las capitales europeas, en particular en Bruselas y en BerlÃn.
Semana clave para Grecia y la UE (LA RAZÃ“N 3. Puntazos) El lÃder de Syriza no ha conseguido tranquilizar a nadie con sus promesas de que pagarÃ¡ la deuda.