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ALMODÓVAR DICE QUE NO SABÍA NADA DE LOS PAPELES DE PANAMÁ

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“No siento un ápice de culpa sobre nada de lo que he hecho”, ha asegurado Pedro Almodóvar este martes en el Festival de Cannes, durante un encuentro mantenido con la prensa española, en referencia a la vinculación de su nombre a los papeles de Panamá. “Yo no sabía nada del asunto y en todo caso, como ya he dicho, asumo toda la responsabilidad y pido disculpas. Pero creo que, quizá porque soy un personaje atractivo para la prensa, se me ha dado un trato que no me corresponde”, ha añadido el director manchego justo después de la aplaudida proyección para la prensa de su 20ª película, Julieta, la sexta de su carrera que recibe el honor de ser presentada en el certamen francés.

En ese sentido, el director manchego se ha mostrado muy crítico con el uso que los medios españoles han hecho de la masiva filtración de documentos, gracias a la que se supo que tanto él como su hermano y socio en la productora El Deseo, Agustín Almodóvar, fueron apoderados de una sociedad radicada en las Islas Vírgenes Británicas entre 1991 y 1994. “Yo aplaudo la filtración, ojalá que se termine con los paraísos fiscales de una vez, pero estoy en desacuerdo con la mercantilización de la información. Y ese es un asunto sobre el que los medios deberían reflexionar”, ha asegurado en relación al “reality show” en el que, añade, se vio “obligado a participar”.

Asimismo, Almodóvar se ha mostrado cauto a la hora de valorar el papel que la polémica ha podido jugar para explicar los malos resultados de taquilla -“los peores de toda mi carrera”- que "Julieta" ha cosechado desde su estreno en salas el pasado 8 de abril. “Es difícil de saber, pero por supuesto no le ha hecho ningún bien. La noticia salió la misma semana del estreno, y frustró la recta final de la promoción. Pero estoy seguro de que tiene muchas oportunidades más por delante”, ha afirmado sobre el filme, recibido con una cerrada ovación por la crítica internacional. “Y en todo caso yo estoy muy contento con la película. Si antes de rodarla alguien me hubiera dicho lo que iba a pasar, y que eso afectaría su recorrido comercial, incluso así la habría hecho exactamente igual”.

Drama familiar que acompaña durante varias décadas al personaje del título –encarnado por Adriana Ugarte en su juventud y por Emma Suárez en la adultez- y en especial retrata en fuera de campo la traumática relación que mantiene con su hija, "Julieta" representa el quinto intento de Almodóvar de auparse a lo más alto del palmarés de Cannes. Ya ha sido premiado aquí en el pasado –por "Todo sobre mi madre" (1999) obtuvo un premio al mejor director; por "Volver" (2006), otro al mejor guión- y, aunque insiste en que la Palma de Oro no le obsesiona, no tira la toalla.

“Ya que vengo a Cannes prefiero hacerlo a competición. La película va a recibir críticas compita o no, y prefiero competir porque es más excitante. No soy una vaca sagrada”. El reparto de "Julieta" al completo acompañó al manchego en su puesta de largo en la Croissete, atrayendo, por supuesto, todos los flases del día. Cannes, como siempre, a los pies de Almodóvar.

ABUCHEOS A ASSAYAS

¿Merecía "Personal shopper", segunda aspirante a la Palma de Oro presentada este martes, el ruidoso coro de abucheos recibidos? No, ninguna película merece algo así. Más que de los méritos artísticos de este nuevo –y, sí, problemático- trabajo de Olivier Assayas, la violenta reacción habla del miedo que un sector de la industria le tiene a todo lo diferente. Y una película de fantasmas firmada por un director como Assayas es tan inesperado como, pongamos, los sería un musical protagonizado por "drag queens" a cargo de Ken Loach.

En realidad, los fantasmas de "Personal shopper" no son más que un disfraz. Assayas utiliza el género como un mero instrumento para meditar sobre la crisis espiritual y el proceso de luto de una joven que encarna una Kristen Stewart a través de una interpretación repleta de tics –nada que ver con el magnífico trabajo que ofreció en la película previa de Assayas, "Viaje a Sils Maria" (2014)-. En última instancia, eso sí, el problema esencial del filme no es ella. Si por un lado Assayas adopta una posición de superioridad y desdén respecto a los códigos del cine de terror, por el otro renuncia a dotar del drama psicológico de verdadera hondura intelectual.

Viggo Mortensen en formato "hippie"

Presentada fuera de competición, "Captain Fantastic" está protagonizada por Viggo Mortensen en la piel de un "hippie" que educa a sus cinco hijos en el bosque del noroeste de Estados Unidos cuya vida idílica se pone patas arriba cuando recibe la noticia de la muerte de su esposa. De vuelta a la civilización, debe enfrentarse a los problemas derivados de sus radicales métodos como progenitor. Aclamada en el pasado Festival de Sundance, la película “le toma el pulso al aquí y ahora de la sociedad americana”, asegura Mortensen.

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