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RAJOY TOMA AIRE CON EL APOYO DE RIVERA Y DE LOS NACIONALISTAS

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Mariano Rajoy quiere coger impulso e iniciar en los próximos días una nueva ronda de conversaciones con los partidos en torno a su investidura. En vísperas de que el jefe del Estado inicie sus propios contactos con los grupos para decidir si propone y a quién que trate de formar gobierno, Rajoy busca apurar la racha positiva que se le ha abierto en el Congreso. Allí ha logrado garantizarse la presidencia y, de paso, una mayoría conservadora en la Mesa tras su pacto con Ciudadanos, que se lleva lo suyo de la jugada: dos sillas que no le correspondían por derecho y una probada capacidad de veto con 32 diputados. 

Rajoy quiere beneficiarse también del ambiente creado después de que nacionalistas e independentistas, tras horas de negociación bajo cuerda, hayan colaborado con el PP, por la vía de la abstención, para que Ana Pastor venciera por 14 votos al socialista Patxi López. Por más excusas que se hayan puesto por parte de los protagonistas para disimular el resultado final. Porque organizaciones como CDC, PNV y Coalición Canaria, según fuentes del PP (y aunque los "acusados" se empeñen en negarlo amparándose en que el voto es secreto), se prestaron no ya a votar en blanco, sino afirmativamente para garantizar que populares y naranjas tuvieran dos vicepresidencias en el órgano de decisión de la Cámara. Ahí es nada.

¿Qué les ha dado el PP a cambio? Cabe puntualizar primero que ERC se desentiende de  lo ocurrido señalando que como no hubo acuerdo PSOE-Podemos, se abstuvieron para no ser “tonto útil” de los morados avalando a su aspirante Xavier Domènech, que no pasó de la primera votación. En cuanto al resto, Francesc Homs daba este martes versiones para todos los gustos, aunque otros diputados se sonreían. Se apuesta por que es cuestión de horas que presente su fórmula parar tener grupo propio y que no encontrará rechazo. Los nacionalistas vascos, por su lado, conservan sillón en la Mesa del Senado por “generosidad” del PP. Lo que obtenga en el medio plazo Coalición Canaria y si hay más prebendas para PNV y CDC está por ver.

FECHA PREVISTA DE LA INVESTIDURA: 2 DE AGOSTO

Para no molestar por exceso de optimismo a cuantos le ayudaron en esta jornada, Rajoy salió a la palestra a subrayar que la legislatura empezaba “bien”, pero que no había que deducir que había más acuerdos a la vista de los que afectaban a las Cortes. Agregó que quiere asumir su responsabilidad para conformar un Gobierno lo antes posible, pero que necesita que los demás acepten “la propia” y opten, al menos, por no bloquear que haya un Gobierno en agosto que diseñe unos Presupuestos que urgen. El jefe del Ejecutivo en funciones repitió que está dispuesto a intentarlo con sus 137 diputados y una abstención generalizada.

Sobre si mantiene su intención de presentarse a una investidura el 2 de agosto (con votaciones el día 3 y 5), nuevamente eludió una respuesta concreta, mientras sus compañeros de filas siguen jugando al despiste dando versiones contradictorias. Rajoy, que permite que todas esas posturas se difundan –seguramente para aumentar la presión sobre el resto de partidos-, se limita a aseverar que quiere gobernar y a reclamar a los demás que no lo impidan.

RIVERA Y LOS PRESUPUESTOS

Ciudadanos, pese al primer acuerdo con el PP, sigue marcando cierta distancia. Ante la prensa, Albert Rivera volvió a mostrarse dispuesto a pactar el techo de gasto el próximo mes y elaborar unos Presupuestos para el 2017, cuya dureza por los recortes que se tengan que hacer se conocerá en las próximas semanas. El Ejecutivo en funciones está negociando en estos momentos con la Comisión Europea una nueva senda de déficits públicos para este año y siguientes. Es a lo único a lo que se ha comprometido con los populares, asegura Rivera, que insiste en que sus diputados se abstendrán en la investidura de Rajoy y que no cambiarán al ‘sí’.

Y el distanciamiento visto este martes en la Cámara baja entre el PSOE y Podemos se tornó en coincidencia cuando dirigentes de las dos formaciones analizaron las consecuencias a corto plazo de la entente entre el PP con C’s y nacionalistas. Según Pablo Iglesias y el entorno de Pedro Sánchez, la alianza forjada por Rajoy para repartir puestos en el Congreso es el germen de lo que puede ser la votación de investidura. De hecho, según los socialistas el acercamiento a CDC y PNV demuestra, a su juicio, que el PP ya no les necesita para la reelección. Las cuentas serían estas: 137 escaños del PP, más 32 de Ciudadanos, más uno de Coalición Canaria sumarían 170 escaños, a seis de la mayoría absoluta. Pero si los ocho de CDC, que en principio tendrán grupo propio gracias al PP, y los cinco del PNV se abstuvieran, como han hecho este martes con Pastor, las cuentas saldrían para lograr la investidura por mayoría simple, en segunda votación.

“Rajoy ha iniciado una senda que esperamos que se consolide pronto. Ha demostrado que tiene capacidad para llegar a acuerdos con nacionalistas e independentistas. Estaría bien que nos dijeran a cambio de qué", afirmó tras la votación el portavoz socialista, Antonio Hernando.

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