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PATÉTICA BURUAGA

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LA RUEDA DE PRENSA de Sáenz de Buruaga, acompañada de todos los que quieren repetir en los cargos o tener hueco en las listas del 19, ha resultado patética. Es la prueba más palpable de su fracaso y de la ruina electoral que espera al PP si finalmente encabeza la lista regional de su partido, cuyo final anticipado no parece difícil pronosticar: la derrota estrepitosa que cosechó en su ayuntamiento -Suances- cuando encabezó la lista municipal.

La defensa que en la rueda de prensa ha hecho de Miguelín no puede ser más desafortunada. Según su tesis, Miguelín es tan fiel al partido que por su libre iniciativa acudió a un banco para hacer de depositario de miles de euros para pagar las cuotas de 511 militantes que necesitaban urgentemente para que la derrota en las primarias no fuera estrepitosa. Sin embargo, a pesar de las "trampas" las perdió por casi 200 votos.  En consecuencia, amparó libremente el "pucherazo" que se organizaba, sin importarle las consecuencias. 

Frente a esta tesis de Buruaga, si acudiera a Laredo y sondeara a la ciudadanía, podría conocer quien es Miguelín y que papel juega en la sociedad pejina. Desgraciadamente sufre  varias minusvalías, lo que llevó a Buruaga y a su equipo de confianza a abusar de esta persona utilizándole para sus fines torticeros y mafiosos. Buruaga ya se encumbra en el patetismo cuando llega a comparar a Miguelín con el desaparecido Stephen Hawking, afirmando que si se niega a Miguelín facultad para actuar, también habría que impedir que Hawking participara en el congreso del PP.

Buruaga a pesar de haber roto el partido con prácticas intolerables en una democracia, tal y como se ha denunciado desde medios nacionales, se mantiene en el puesto por obra y gracia de su benefactor o protector, que no es otro que el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, verdadero artífice en la sombra de unas irregularidades -insistimos, denunciadas por medios nacionales y en vía judicial- que necesitaba para apartar del camino a Diego y a sus seguidores. No quiere saber de candidaturas a nivel de autonomía o de Santander-ciudad, pero sí de aparecer en Madrid para sus influencias e intereses políticos como el amo del prao en el PP de Cantabria.

Lo que han dicho los críticos de Buruaga es lo que vienen escribiendo medios nacionales en los últimos días, después de "descubrirse" el fondo de la trama y quienes participaron en la misma.  La compañía con la que aparece Buruaga, son los fieles hasta que mantengan el puesto. Otros terminarán en el paro, porque el PP necesitará prescindir de ellos. E igual de patético es ver al delegado del Gobierno que tiene otras funciones más públicas e institucionales que las de ejercer el "cierre de filas" que impone el guión. Mal por parte de él y de quienes le han podido obligar a acudir. Sin duda, esperpéntico.

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