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El primer ministro islandés, primera víctima por implicación en los "papeles de Panamá"

El primer ministro sostuvo tras estallar el escándalo de los "papeles de Panamá" que en ningún momento ni él ni su mujer hicieron uso de esa firma para evitar pagar impuestos en Islandia.

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El primer ministro islandés, primera víctima por implicación en los "papeles de Panamá"
05-04-2016

 El primer ministro islandés, Sigmundur David Gunnlaugsson, ha dimitido por su implicación en los llamados "papeles de Panamá" por haber tenido una empresa en un paraíso fiscal. Su dimisión llega tras haber solicitado la disolución del Parlamento, propuestaque fue rechazada por el presidente del país, Ólafur Ragnar Grímsson.

Gunnlaugssonn seguirá al frente de su partido, que ha propuesto al hasta ahora ministro de Agricultura, Sigurour Ingi Jóhansson, como nuevo primer ministro, según la televisión pública islandesa RÚV.

En medios locales se baraja la posibilidad de que se abran consultas para la formación de una nueva alianza gubernamental o que se convoquen elecciones anticipadas.

Más de 10.000 personas se manifestaron ayer tarde en el centro de Reikiavik para pedir la dimisión de Gunnlaugsson, líder del Partido Progresista, tras aparecer su nombre en las documentos de un bufete panameño filtrados a numerosos medios internacionales.

En paralelo, las cuatro fuerzas de la oposición -socialdemócratas, Piratas, Izquierda-Verdes y Futuro Brillante- solicitaron formalmente un voto de censura contra el jefe del Gobierno, cuestión para la que no se ha concretado aún una fecha.

Aún ayer, Gunnlaugsson había expresado ante la televisión islandesa su determinación a seguir al frente al Gobierno y apostó por agotar la legislatura para que los electores muestren su parecer en los próximos comicios, previstos para la primavera de 2017.

Los "papeles de Panamá", difundidos por diversos medios y el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ, por su sigla en inglés), muestran que Gunnlaugsson y su esposa, Sigurlaug Pálsdóttir, eran dueños de una sociedad de Islas Vírgenes Británicas llamada Wintris.

Ahí depositaron casi 4 millones de dólares en bonos en los tres principales bancos islandeses, que se hundieron en la crisis de 2008.

Gunnlaugsson entró en el Parlamento islandés en 2009 y a finales de ese año vendió su 50 % de participación en Wintris a su esposa por un dólar.

El primer ministro sostuvo tras estallar el escándalo de los "papeles de Panamá" que en ningún momento ni él ni su mujer hicieron uso de esa firma para evitar pagar impuestos en Islandia.

Poco después de aparecer su nombre y el de su esposa en los medios de todo el mundo, empezaron a arreciar las demandas de dimisión desde las filas opositoras, así como las convocatorias en las redes sociales a manifestarse por el centro de la capital.

Tras una legislatura de gobierno socialdemócrata después del colapso económico del país en octubre de 2008, Gunnlaugsson llegó al cargo de primer ministro en 2013 con el apoyo del Partido de la Independencia, cuyo líder, Bjarni Benediktsson, actual ministro de Finanzas, también aparece en los denominados "papeles de Panamá".


ÉLITE DEL DINERO

La bola ha caído y las fichas de un complejo dominó en el que están implicados políticos o personalidades de primera línea mundial que habían colocado dinero en paraísos fiscales a través de empresas offshore articuladas por el bufete panameño Mossack Fonseca han comenzado a tambalearse. Lo han hecho de tal forma que algunos como el Gobierno ruso (salpicado de forma indirecta) han desempolvado argumentos de la Guerra Fría para defenderse. De momento, varias fiscalías como la portuguesa y la española o países como la propia España, Francia, Suiza u Holanda han anunciado la apertura de investigaciones sobre aquellos nombres que aparecen en los documentos.

 

Aunque la creación de una offshore no resulta ilegal mientras tribute en el país en el que tiene la actividad, la cuestión es que su opacidad permite que pueda usarse como instrumento para ocultar actividades delictivas. De hecho, como ponen los documentos, el bufete panameño indica en algunos de los correos electrónicos que intercambió en su día con algunos bancos, que no sabe en algunos casos el nombre del verdadero dueño de la compañía, información que custodia el banco intermediario.

Justo el lunes algunas entidades financieras como el principal banco alemán, Deutsche Bank, reconocieron que habían colaborado con varios clientes para la intermediación de empresas en paraísos fiscales, pero lo había realizado de forma legal. Al parecer, según El Confidencial, otros bancos que habrían mediado en el registro de unas 15.600 sociedades pantalla, son el HSBC, el UBS o Societé Generale.

Ante todo esto, el debate sobre la urgencia de realizar un mayor control sobre los paraísos fiscales está sobre la mesa. EE.UU. lo ha reclamado, además de que el comisario de Asuntos Económicos de la UE, (UE), Pierre Moscovici, cree que los europeos deben llegar a un acuerdo sobre qué es un paraíso fiscal.

Lo grave, al menos moralmente, es que la investigación conocida como los papeles de Panamá, liderada por el periódico alemán Süddeusche Zeitung y el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación, revela una práctica mundial llevada a cabo por 140 altos políticos o personalidades de relevancia mundial con perfiles tan dispares como el del rey de Arabia Saudí, los presidentes de Ucrania y Argentina o los primeros ministros de Islandia y Pakistán. El líder ruso Vladimir Putin, aunque no aparece citado, también es salpicado porque bancos, compañías y personas cercanas colocaron 2.000 millones de dólares en empresas pantalla. Lo mismo les ocurre a los candidatos a la presidencia peruana Fujimori y Kuczinski.

Pero en los 11,5 millones de documentos analizados durante más de un año, donde hay 214.000 empresas registradas en paraísos fiscales, también aparecen familiares de políticos como el padre del primer ministro británico, David Cameron, ya fallecido, o allegados del presidente chino, Xi Jimping. Lo curioso es que ambos han construido una imagen basada en la transparencia.

Las consecuencias de la filtración no se han hecho esperar. Para el presidente de Transparencia Internacional España y catedrático de la Universidad Autónoma de Madrid, Jesús Lizcano, la publicación tiene dos lecturas: «Por una parte da una idea de los estratosférico del problema, pero por otra es que es muy importante que se conozca y que los gobiernos articulen medidas para luchar contra ese tipo de prácticas. Además puede provocar un efecto disuasorio».

Movilizaciones en Islandia

La petición de las primeras cabezas no se ha hecho esperar. Uno de los primeros en ver cómo su cargo se tambalea es el presidente de Islandia, Sigmundur David Gunnlaugsson. El resto de partidos representados en el Parlamento del país han pedido una moción de censura y 22.000 ciudadanos de un estado con 320.000 habitantes también. Por no hablar de la movilización popular para que lo deje. Pero el responsable del Gobierno lo niega y se aferra al cargo. En cambio, Ucrania dice que no investigará a su presidente, Petro Poroshenko.

 

EL CASO DE PEDRO ALMODOVAR

Agustín Almodóvar, hermano y productor del director de 'Todo sobre mi madre', acaba de lanzar otro comunicado horas después de haber asegurado que tanto él como Pedro Almodóvar estaban al corriente de todas sus obligaciones tributarias. El productor insiste en que, desde el primer año de vida de El Deseo, ambos hermanos se repartieron las tareas y obligaciones de forma muy clara. "Yo me hice cargo de todos los asuntos referidos a la gestión de la empresa y él se dedicó a los aspectos creativos".

 

"Me gustaría aclarar que la constitución de la sociedad en 1991 [se refiere a la entidad desvelada en los papeles de Panamá se debió a la recomendación de mis asesores ante una posible expansión internacional de nuestra empresa". Agustín Almodóvar añade que la sociedad "se dejó morir sin actividad" porque "no encajaba" con la forma de trabajar en El Deseo.

La noticia de 'Los papeles de Panamá' llega, precisamente, la misma semana en la que el cineasta manchego se halla de promoción para el estreno de su última película, 'Julieta', el próximo viernes. Esta mañana, precisamente, se ha presentado la película en Barcelona, con presencia, únicamente, de sus actores: Emma Suárez, Adriana Ugarte, Inma Cuesta, Michelle Jenner y Daniel Grao. El miércoles se llevará a cabo la presentación en Madrid, con presencia prevista del propio Pedro Almodóvar.

"Lamento profundamente el perjuicio que está sufriendo la imagen pública de mi hermano, provocado única y exclusivamente por mi falta de experiencia en los primeros años de andadura de nuestra empresa familiar", concluye tras recordar, una vez más, que los dos hermanos están al corriente de sus obligaciones tributarias.

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