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Francia da un respiro a Europa con el pase de Macron a la segunda vuelta

Emmanuel Macron habría ganado la primera vuelta de las elecciones francesas con el 23% de los votos, aproximadamente, sobre los 21% de Marine Le Pen, la representante de la ultraderecha eurófoba y xenófoba.

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Francia da un respiro a Europa con el pase de Macron a la segunda vuelta
23-04-2017

Dentro de la gran noticia histórica que supone el hecho de que ni Partido Socialista ni el partido conservador, ahora llamado Los Republicanos, no ha habido sorpresas: Emmanuel Macron habría ganado la primera vuelta de las elecciones francesas con el 23% de los votos, aproximadamente, sobre los 21% de Marine Le Pen, la representante de la ultraderecha eurófoba y xenófoba.

Hamon pide el voto para Macron

No són aún cifras oficiales, sino las primeras estimaciones basadas en las encuestas a pie de urna. Pero han sido suficientes para que, por ejemplo, Benoit Hamon, el candidato socialista, anunciara de inmediato su dimisión tras conocerse esos resultados parciales. Además, pidió el voto en ese mismo instante para Macron, puesto que explicó que se trataba del rival, pero no del enemigo político, que era la ultraderecha de Le Pen, a quien señaló clara y contundentemente como el mal a superar en esa segunda votación el domingo 7 de mayo.

El resto de los candidatos

También acertaron esta vez las encuestas, no como en el Brexit o las elecciones norteamericanas, con los otros candidatos. Si bien los sondeos anticiparon el primer puesto para el economista independiente Macron y el segundo para la ultra Le Pen, François Fillon quedó tercero, dejando después de mucho tiempo a los conservadores fuera de la pugna por la República francesa. Distinta fue la forma de quedar fuera de segunda ronda la del candidato izquierdista Jean-Luc Mélenchon, de abuelo español, murciano. El equivalente al Pablo Iglesias en el país vecino celebra ese cuarto puesto como una pequeña victoria moral al confirmar el 'sorpasso' frente al Partido Socialista, que evidenció que el pueblo galo está harto, decepcionado y desencantado del partido de Hollande, el presidente saliente.