Dos de las cuatro víctimas murieron al caer un pino ardiendo encima de la furgoneta
La máxima preocupación se centra en el sur de Pontevedra, donde la cercanía de las llamas en torno a la ciudad de Vigo obligó anoche a desalojar la fábrica de coches PSA Peugeot-Citröen y otras naves industriales
16-10-2017
ÚLTIMA HORA. Dos de las cuatro víctimas de los incendios, murieron al caer sobre la furgoneta en la que viajaban un pino ardiendo. En estos momentos -21 horas- el intenso humo dificulta las labores de extinción de 60 incendios en Galicia.
Los más de ochenta incendios registrados este fin de semana en Galicia se cobraron ayer la vida de dos personas que fueron halladas calcinadas en el interior de una furgoneta en una carretera que une las parroquias pontevedresas de Chandebrito y Camos, en el Ayuntamiento de Nigrán.
Las agencias de noticias elevaban esta madrugada a tres las víctimas mortales, tras el hallazgo del cadáver de un hombre de 78 años que falleció al intentar apagar las llamas para salvar a sus animales en el municipio orensano de Carballeda de Avia.
Se trata de las tres primeras víctimas mortales de una oleada de fuegos que amenazan núcleos de población en nueve municipios de Pontevedra, Ourense y Lugo. El origen de la mayoría de los incendios es provocado, según aseguró ayer el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo. "Los incendiarios están bordeando el homicidio", subrayó.
La máxima preocupación se centra en el sur de Pontevedra, donde la cercanía de las llamas en torno a la ciudad de Vigo obligó anoche a desalojar la fábrica de coches PSA Peugeot-Citröen y otras naves industriales en el polígono de Balaídos, así como un hotel y la residencia de estudiantes de la universidad.
El incendio registrado en Gondomar, localidad situada en el área metropolitana de Vigo, obligó a desalojar a los vecinos de Vincios, Devesa y Sobreira. El fuego de mayor magnitud es el registrado en la localidad de Ponteareas (Pontevedra), que ayer se extendió a los municipios de Redondela, Soutomaior y Pazos de Borbén.
La Unidad Militar de Emergencia se ha unido a los servicios de extinción de la Xunta para luchar contra unas llamas que ayer incluso lograron cruzar las aguas del río Miño desde Portugal, donde este fin de semana se han registrado más de 400 incendios que han dejado cinco víctimas mortales.
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