El 62% de los cántabros asume esperar más de 3 días por la reparación de su smartphone
El dato más elevado del país
Wiko, la marca europea de smartphones, en su afán de conocer las preocupaciones y necesidades de los usuarios de sus terminales y poder darles una atención más cualificada, ha realizado el I Estudio “Generación Game Changer”, un informe demoscópico que analiza los hábitos y normas que han cambiado en los últimos años, tanto en rutinas y prácticas sociales, como en aspectos relacionados con la tecnología. De este informe, que también recoge datos por comunidades autónomas, se desprende que el 62,5% de los cántabros acepta esperar al menos 4 días por la reparación de su smartphone. Este porcentaje dista en gran medida de la media en España, donde tan solo el 39% de los encuestados está dispuesto a esperar ese tiempo.
Con estos datos, Cantabria se convierte en la región con los usuarios menos exigentes del estudio, ya que únicamente el 37% de los cántabros reclama tiempos de reparación de sus teléfonos móviles inferiores a 3 días, situándose muy por debajo de la media nacional, donde el 60% de los españoles demanda reparaciones en menos de 3 días.
El estudio, en el que ha participado una muestra de 2000 personas de entre 18 y 55 años procedentes de toda España, también revela que Cantabria es una de las regiones dónde pueden aguantar más tiempo sin su terminal mientras está siendo reparado. En este sentido, un 29% de los cántabros asume esperar más de una semana por la reparación de su teléfono, porcentaje solo superado por Galicia (30%). Además, existe un 12,5% aún menos exigente que asegura poder aguantar el tiempo que haga falta sin el teléfono móvil mientras lo reparan.