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La CUP exige pasos "irreversibles" hacia la secesión antes de negociar sobre Mas

Los anticapitalistas rechazan entrar en el Gobierno, pero avisan a Junts pel Sí de que tendrá que "desobedecer" al TC

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09-10-2015

 

La CUP exigió ayer a Junts pel Sí que antes de debatir si Artur Mas debe ser investido presidente de la Generalitat se den pasos "irreversibles" de ruptura con España para avanzar hacia la independencia y fundar una "república catalana".

En una conferencia pronunciada por seis de los diez nuevos diputados de la CUP en el Parlament, Josep Manuel Busqueta, uno de los parlamentarios del partido, dejó claro que su formación no desea entrar en el nuevo Ejecutivo ya que rechaza "cargos" y "privilegios".

Después de recalcar que en el proceso hacia la independencia "no sobra nadie", Busqueta presentó a Junts pel Sí como la "única formación que debe formar Gobierno" y la invitó a buscar "las mejores personas" para seguir impulsando el camino hacia la independencia, pero no se refirió nunca a Mas.

El diputado de la CUP advirtió a Junts pel Sí que la nueva república no se puede construir desde la legalidad española, así que llamó a la lista de Mas a asumir que tendrá que "desobedecer" al Tribunal Constitucional (TC).

Busqueta lanzó un aviso: "No queremos reeditar un pacto con el Estado ni con las élites, estamos aquí para cambiarlo todo, y para empezar a construir la república catalana necesitamos poner el acento en lo que dice el pueblo indignado harto de las imposiciones de la 'troika' comunitaria". "La CUP -avisó- entiende que esto no va ni de investir nuevos gobiernos autonómicos ni de negociar con el Estado español encajes imposibles, sino de democracia y de soberanía".

"No aspiramos a reproducirnos como estructura política, somos los de 'para todos, todo' y 'para nosotros, nada'", arengó el diputado antes de apuntar que "en Madrid, como aquí, hay quien trabaja intensamente por asociar el proceso a una sola persona, y llega hasta el ridículo", pero "nosotros sabemos que el proceso es colectivo".

El cabeza de lista de la CUP, Antonio Baños, dijo que con el proceso "no se trata de crear una mini-España" ni tampoco va de un simple "cambio de bandera, ni de una transacción de élites".

No un papel

También señaló que la futura Constitución catalana "no puede ser sólo un papel o un documento, el proceso constituyente tiene que ser el motor de un nuevo país pensado para el siglo XXI". Y propuso convertir el Parlament en una "asamblea constituyente".

La "número dos" Anna Gabriel, explicó que su formación quiere acordar el "qué" y el "cómo" se construye la república catalana y dar pasos "irreversibles" antes de debatir sobre "quién" preside la Generalitat.

Gabriel se quejó de que "la presión hacia la CUP", cuyos diez diputados son decisivos para la investidura del presidente de la Generalitat, está siendo "injustamente dura".

Otro conferenciante, Albert Botran, remarcó que será necesaria la "unilateralidad" porque "el arma del Estado es no moverse" y esperar a que "el paso del tiempo" divida a Cataluña.