Los hombres de Casado: Movellán solo "arañó" 30 votos en Camargo y Corro no salió elegido compromisario
La estrategia de Buruaga de ocultar su apoyo incondicional y de su aparato hacia Santamaría ha quedado al descubierto y la intención de repartir parte de la dirección de regional en la otra candidatura ha sido en vano.
07-07-2018
Iñigo de la Serna y Gema Igual, alcaldesa de Santander, han apostado de manera muy clara por Soraya Sáenz de Santamaría como candidata a la presidencia del Partido Popular.
Desde la dirección regional intentaron ocultar sus intenciones con unas declaraciones en las que María José Sáenz de Buruaga afirmó que se mantendría imparcial en todo este proceso. La realidad dista mucho de las intenciones mostradas por la Presidenta de los populares cántabros, ya que “su gente” -según se ha podido contrastr- han estado llamando tanto a afiliados como a cargos importantes dentro de la región para que se movilizaran a favor de Santamaría.
La prueba más evidente de este apoyo, que se ha intentado encubrir, ha sido que apenas pasadas unas horas de los resultados de las primarias, Buruaga, apostaba por Soraya como Presidenta del PP, ya que había logrado un mayor apoyo de los afiliados en primera vuelta.
A la presidenta del PP cántabro se la olvida que en el Congreso Regional Ignacio Diego consiguió un mayor apoyo por parte de los afiliados. Según la teoría que hoy defiende Buruaga, Diego debería haber sido el presidente de la formación en Cantabria.
Evidentemente en Cantabria hubo muchos factores, de sobra conocidos, que influyeron en el resultado final. Un ejemplo son los argumentos que forman parte de la denuncia presentada por Santiago Recio, antiguo vicesecretario regional, que recogen el pago masivo de cuotas desde la cuenta del famoso “Miguelín”, tantas veces denunciada por los llamados críticos.
Lo cierto es que durante estas últimas semanas se ha visto como Juan Corro o Diego Movellán, cercanos a Buruaga, trabajar para la candidatura de Pablo Casado. Este apoyo se define como una estrategia por parte de la dirección regional para “repartir los huevos en diferentes cestas”, en opinión de un representante crítico.
El apoyo no ha sido más que una declaración de intenciones, ya que los resultados de ambos han sido más bien tristes. El diputado nacional y lider de Camargo, tan sólo arañó algo más de 30 votos para Casado; cantidad que es 5 veces inferior a los votos que consiguió movilizar en el Congreso Regional del PP. Su resultado real ha sido, en opinión de fuentes consultadas, realmente insignificante ya que ha encontrado con poco eco entre la militancia en el ayuntamiento del que fue alcalde.
Aún más controvetido ha sido el resultado de Juan Corro, quien trabajó como enlace de campaña de Casado en Cantabria y que según los resultados para compromisarios, no ha salido elegido en Santander logrando tan sólo 30 votos. Cabe recordar que en Santander varios compromisarios elegidos han logrado más de 200 votos.
La estrategia de Buruaga de ocultar su apoyo incondicional y de su aparato hacia Santamaría ha quedado al descubierto y la intención de repartir parte de la dirección de regional en la otra candidatura ha sido en vano.
Buruaga buscó este camino, ya que un 50% del PP cántabro que aún no se ha integrado en la dirección actual y tampoco parece que lo vayan a hacer. Este sector tiene una gran relación con Pablo Casado y pueden formar parte de su equipo.
Este 50% del PP de Cantabria, contrario a Buruaga e Iñigo de la Serna, apostó por repartir sus apoyos entre Cospedal y Casado asegurando sus compromisarios, tarea que han llevado a cabo con éxito, ya que,según se nos informa, son más de 20 los compromisarios logrados por los afines a Ignacio Diego.
La dirección regional del PP de Cantabria expresa cierto estupor ante la posibilidad de que Pablo Casado se convierta en el nuevo presidente nacional, ya que éste es capaz de buscar una solución al conflicto cántabro con la fórmula de integrar ambas partes. Esto podría suponer que tuviese que prescindir de la presidenta regional.
Tras la visita de Casado a Cantabria, el sector de la dirección regional tuvo un mal sabor de boca ya que no escucharon las palabras de apoyo incondicional como si mostró Iñigo de la Serna durante su mitin a favor de Soraya. De Casado escucharon un discurso basado en la unidad y el futuro; única solución para que el Partido Popular de Cantabria pueda luchar para ganar las elecciones a Miguel Ángel Revilla.
El PP de Cantabria puede seguir dos caminos en función de quien sea el que consiga llevarse el gato al agua. Si Santamaría gana, la formación seguirá igual y su resultado electoral podrá ser como aseguran las encuestas dejando de ser la primera fuerza a la tercera o cuarta; si Casado es el vencedor se encargará de reconstruir la formación en Cantabria integrando a aquellos que hoy están fuera y pueden salvar los resultados electorales del PP en 2019.