Se espera un Maratón de San Sebastián muy cántabro

Casi un centenar de atletas de diferentes niveles tomaron parte en la pasada edición de la cita donostiarra, que espera que repitan este año

29-06-2015

Casi un centenar de atletas de diferentes niveles le dieron un notable toque cántabro a la pasada edición del BMW Lurauto Maratón de San Sebastián, que se celebró el 30 de noviembre de 2014. Cada uno con su objetivo, algunos peleando por la mejor marca posible en las diferentes pruebas de la cita donostiarra y otros simplemente saliendo a disfrutar, la mayoría acabaron encantados con la experiencia. No en vano, un 56% de los participantes se declara muy satisfecho y un 35% se muestra satisfecho con la organización y el discurrir de la prueba guipuzcoana, que les espera este año también, el 29 de noviembre.

Aumentar la participación no es un objetivo primordial para esta carrera, que centra sus esfuerzos y mejoras en el atleta. Con un límite de 6.500 participantes para sus tres citas, se busca ofrecer algo diferente, un trato especial a los populares. Sin colas, sin esperas, sin agobios durante la prueba, ni problemas para ducharse después, el corredor agradece los cuidados. Porque no existen los inconvenientes de la masificación, pero el ambiente no se resiente lo más mínimo. Chapeau.

Una gran María Elena Moreno
La gran mayoría de los desplazados a Donostia participó en la prueba reina sobre 42,195 kilómetros, recorriendo un circuito llano al nivel del mar que facilita la obtención de buenas marcas (el 69% de participantes ha mejorado la suya estos últimos años). Sin duda alguna, la gran protagonista de la jornada fue la atleta de Liérganes María Elena Moreno, que completó una brillante actuación y se subió al tercer cajón del podio en la prueba femenina gracias a su crono de 2 h. 40’36’’, cruzando la línea de meta menos de seis minutos después de la ganadora, la asturiana Verónica Pérez.

Entre los populares, el más destacado fue Manuel Zubieta, que concluyó en el puesto 103 con un meritorio crono de 2 h. 45’36’’, con Luis Vélez (2 h. 45’42’’) muy cerca, en la 107ª posición, mientras que Ricardo Villa cerró la participación cántabra masculina (4 h. 43’16’’). Entre las mujeres, destacó el 56º puesto de Ana Bustamante (3 h. 30’17’’), con Prudencia Rayón (3 h. 44’57’’) en 95ª posición y Yolanda Ruiz (4 h. 10’01’’) la más rezagada.

Con una de las ciudades más bellas del mundo como inmejorable escenario y el marco incomparable de La Concha como punto fuerte, la completa oferta turística, hotelera y gastronómica supone un importante reclamo. También lo son sus tres distancias (42,195 km., 21 km. y 10 km.), que permiten a cada atleta tener su sitio.

Menor brillo en la Media y la 10K
Otra veintena de cántabros (13 hombres y 7 mujeres) se dieron cita en el arco de salida de la Media Maratón; y 3 más (2 hombres y 1 mujer) participaron en la prueba sobre 10 kilómetros, ya que en la prueba donostiarra cada atleta tiene su hueco. En la Media, el mejor fue Juan Carlos Poo (1 h. 28’01’’), que firmó el puesto 188, cerrando la clasificación de nuestro territorio las 2 h. 01’05’’ de Felipe González. Entre las mujeres, destacó la 118ª plaza de Luisa Mª Santa Cruz (1 h. 53’32’’) y la más rezagada fue Cristina Casanovas (2 h. 28’20’’). En la 10K, por su parte, Javier Loza (373º) y Loreto González (103ª) completaron juntos la prueba en 53’49’’, con Alejandro Incera (54’14’’) algo más rezagado.

Las primeras 500 inscripciones para este 2015 ‘volaron’ en menos de 48 horas, pero sigue habiendo un descuento del 25% para las nuevas inscripciones y todos los inscritos acceden a sorteos de inscripciones gratuitas e importantes premios. Además, existe la posibilidad de la devolución del 100% de la inscripción por lesión o enfermedad (hasta el 30 de septiembre) y también se puede reservar la misma para 2016 (entre el 1 de octubre y el 10 de noviembre). Y también hasta esa última fecha, se permitirá el cambio de titularidad de todos los dorsales para las tres pruebas.

Un apoyo inagotable
El resto lo pone el público donostiarra y guipuzcoano, que se caracteriza por el máximo apoyo que brinda a todos los participantes de ésta y cada una de las pruebas atléticas que se celebran a lo largo del año en el territorio. Precisamente porque lo lleva en su ADN, siempre se echa a la calle dispuesto a dar un empujón clave a los mejores en pos de sus objetivos o el último aliento a quienes más sufren en la recta final de un esfuerzo tan grande.

Correr un maratón supone toda una experiencia vital. Y en Donostia alcanza una nueva dimensión.