Ayer el vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Francisco Igea, pidió a los ciudadanos «sean ustedes mejores de lo que somos sus gobernantes». Y a este paso la verdad, es que con poco que hagamos lo conseguiremos. Esto de tener 17 gobiernos a la hora de tomar una decisión y no ser capaces de ponerse de acuerdo en ese Consejo Interterritorial de Salud, nos produce una sensación de hartazgo y de decepción que ya empieza a ser insoportable. ¿Recuerdan aquello de la “Cogobernanza”? esa maravillosa palabra, pues parece que para lo único que ha servido es para incorporarla al nuevo glosario de la pandemia. A estas alturas aún no sabemos si viajamos si no viajamos, si nos juntamos, si no nos juntamos y si tenemos que cambiar de Comunidad eso ya si que dependerá de la Bola de Cristal.

Por primera vez en mucho tiempo, suscribo una frase de un político. Lo malo es que tampoco confío mucho en nosotros la verdad. Creo que ya hemos dado muestras más que suficientes de que no salimos ni mejores ni más fuertes y si además ahora lo dejan en nuestras manos, cualquier cosa puede pasar. No sé, hemos pasado del tono paternalista de “venga no pasa nada, está todo controlado, además aquí estoy yo para que nadie se quede atrás, pero sed buenos y portaos bien” al “vosotros veréis lo que hacéis porque nosotros somos incapaces de ponernos de acuerdo y tener un mismo criterio para adoptar una decisión y decretar las mismas medidas”.

En fin, y mientras se pelean y nos distraen y nos enfrentan en el conmigo o contra mí aquí seguimos, unos días viviendo y otros sobreviviendo a este 2020, añorando, echando de menos con el alma, tachando días y casi queriendo tachar ya el 24, el 25, el 31... volviendo a contar a los nuestros, respirando cada noche aliviados cuando no nos falta ninguno Y Con la esperanza puesta en el 2021 y en la que parece va a quitar protagonismo al protagonista estrella del 2020, la vacuna. Esa de la que no sabemos nada pero que parece que tampoco nos importa. La más rápida y efectiva de todos los tiempos. Ojalá y con ella a nuestros políticos le pusieran una dosis de recuerdo para que no olvidaran que a la política se viene a servir.