A Sánchez se le complican los pactos para la investidura tras la constitución de los ayuntamientos
En algunas regiones han tenido que dejar de lado a nacionalistas vascos y catalanes o también contrariar a constitucionalistas como Navarra Suma o Coalición Canaria, lo que le impedirá llegar a pactos en el Congreso.
17-06-2019
En estos momentos, el PSOE tiene más complicada la investidura de Pedro Sánchez que hace unos días, en contra de sus planes iniciales. Los socialistas se han cerrado puertas y han perdido socios después de las complicadas constituciones de los ayuntamientos este sábado. En algunas regiones han tenido que dejar de lado a nacionalistas vascos y catalanes o también contrariar a constitucionalistas como Navarra Suma o Coalición Canaria, lo que le impedirá llegar a pactos en el Congreso para lograr votos de diputados.
En el campo constitucionalista, el PSOE ha impedido que en algunos municipios puedan gobernar Navarra Suma, la coalición que UPN formó con PP y Ciudadanos, lo que hará imposible que los 2 diputados nacionales de esta lista en el Congreso sea favorable a la investidura del actual presidente. Lo mismo ocurrió en varias localidades canarias, donde Coalición Canaria controlaba los ayuntamientos desde hace décadas. Es el caso de Santa Cruz de Tenerife, la capital canaria, donde ahora gobernará el PSOE. La excepción más sonada tuvo lugar en Pamplona, donde el PSN se negó a apoyar al candidato de Bildu, por lo que el alcalde fue Enrique Maya, de UPN. Sin embargo, no será suficiente para hacer posible un apoyo en Madrid de los conservadores navarros.
Problemas en Cataluña
Pero también se ha encontrado problemas en Cataluña, donde si las relaciones con Esquerra Republicana (ERC) ya estaban tensas, ahora están a punto de ser imposibles. La gota que ha colmado el vaso independentista fue el apoyo del PSC a Ada Colau en Barcelona y la ausencia total de un intento por negociar un tripartido entre republicanos, comunes y socialistas. Es cierto que a lo largo de la región, algunas particularidades han permitido apoyos puntuales y acuerdos entre concejales de ERC y PSC, pero globalmente han estado distanciado en políticas de bloques: independentistas contra la izquierda.
Por eso el principal movimiento que hará Sánchez esta semana, después de asumir la responsabilidad de los pactos, va a ser certificar el apoyo de Podemos e IU, Unidas Podemos, con una nueva reunión con Pablo Iglesias, según ha adelantado este lunes la SER, aún sin un día concreto para su celebración.
Las cuentas para ser reelegido presidente
Las cuentas no le salen al PSOE. Los socialistas tienen sus 123 diputados y suman los 42 de Unidas Podemos y En Comú Podem, y no tendrán problemas para añadir a esta suma a los 6 del PNV, el diputado del PRC y el de Compromís. Eso da un total de 173, insuficientes para lograr una mayoría en la investidura. Hará falta que se logren 3 apoyos más, ya sea por la abstención de los diputados de ERC o por un inesperado cambio de actitud de Navarra Suma y Coalición Canaria, que justamente suman 4 en conjunto.
Descartado ganar por mayoría absoluta, en una segunda votación Sánchez necesita una victoria por mayoría simple, es decir, que haya más síes que noes a favor de su investidura. PP, Ciudadanos y Vox suman en total 147 noes, pero podrían agregarse a su postura Coalición Canaria (2 diputados), Navarra Suma (2) y los independentistas vascos y catalanes: ERC, JxCat y EH Bildu. En total, serían 177, pero hay que restar a los 4 diputados catalanes suspendidos por la Justicia, con lo que suman 173, los mismos que tendría Sánchez a favor. El líder socialista necesita abstenciones de cualquier fila para romper el empate.