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España recuerda la Segunda República a los noventa años de su proclamación

España contaba con 23.563.867 habitantes, con una densidad de 46,7 habitantes por kilómetro cuadrado (datos a 30 de diciembre de 1931 del INE), el número de mujeres superaba al de hombres

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España recuerda la Segunda República a los noventa años de su proclamación
14-04-2021

 Diario Crítico

El 'Himno de Riego' es la denominación popular con la que se conoce el himno que cantaba la columna volante del teniente coronel Rafael del Riego tras la insurrección de este militar contra el rey Fernando VII el 1 de enero de 1820 en Las Cabezas de San Juan, cuyo texto es de Evaristo Fernández de San Miguel y música de autor desconocido, aunque alguna versión le atribuye autoría a José Melchor Gomis.

Durante el periodo de la Segunda República Española (1931-1936 o 1939, en función de si consideramos o no la Guerra Civil como una interrupción de su época), se trató de escoger como himno nacional el de Riego, sustituyendo al oficial hasta entonces, la Marcha Real. Sin embargo, en contra de la creencia popularnunca fue oficialmente el himno de la Rep

Con la llegada de la República se hizo necesaria la elección de un himno porque había un rechazo generalizado en la sociedad española de entonces a la Marcha Real, hoy por hoy todavía himno nacional, asociada a la monarquía que se acababa de derrocar. Pero aunque existía un gran apoyo a que el Himno de Riego fuera el himno republicano, se generó una gran polémica sobre su idoneidad como himno de todos los españoles. Debatieron sobre el tema varios políticos, intelectuales y músicos, entre ellos el escritor Pío Baroja, quien en un artículo argumentó en su contra, ya que lo consideraba demasiado bajo en valores e impropio de los ideales del nuevo régimen democrático que había nacido.

Por su parte, el compositor Óscar Esplá, junto al poeta andaluz Manuel Machado, propuso un himno totalmente nuevo, el Canto rural a la República Española, que también fue rechazado. Aunque el presidente Manuel Azaña lo valoró, finalmente no lo propuso como himno nacional.

La realidad es que el Himno de Riego actuó como himno de facto de la República hasta 1939 por la aceptación popular, aunque no fuera oficial, y de hecho fue empleado entre los españoles en el exilio. El Canto Rural de Esplá y Machado también fue popular entre republicanos y antifranquistas.

Letra original del himno de Riego, de Evaristo San Miguel:

Estribillo:

Soldados, la patria
nos llama a la lid,
juremos por ella
vencer o morir.

Serenos, alegres,
valientes, osados,
cantemos, soldados,
el himno a la lid.
Y a nuestros acentos
el orbe se admire
y en nosotros mire
los hijos del Cid.

(Estribillo)

Blandamos el hierro
que el tímido esclavo
del fuerte, del bravo
la faz no osa a ver;
sus huestes cual humo
veréis disipadas,
y a nuestras espadas
fugaces correr.

(Estribillo)

El mundo vio nunca
más noble osadía
Ni vio nunca un día
más grande en valor,
que aquel que inflamados
nos vimos del fuego
que excitara en Riego
de Patria el amor?

(Estribillo)

Su voz fue seguida,
su voz fue escuchada,
tuvimos en nada
soldados, morir;
Y osados quisimos
romper la cadena
que de afrenta llena
del bravo el vivir.

(Estribillo)

Rompímosla, amigos,
que el vil que la lleva
insano se atreva
su frente mostrar.
Nosotros ya libres
en hombres tornados
sabremos, soldados,
su audacia humillar.

(Estribillo)

Al arma ya tocan,
las armas tan solo
el crimen, el dolo
sabrán abatir.
Que tiemblen, que tiemblen,
que tiemble el malvado
al ver del soldado
la lanza esgrimir.

(Estribillo)

La trompa guerrera
sus ecos da al viento
horror al sediento,
ya ruge el cañón;
y a Marte sañudo
la audacia provoca,
y el genio invoca
de nuestra nación.

(Estribillo)

Se muestran, volemos,
volemos, soldados:
¿los veis aterrados
su frente bajar?
Volemos, que el libre
por siempre ha sabido
del siervo vendido
la audacia humillar.

(Estribillo)

Letra del Canto rural a la República Española, por Manuel Machado:

Es el sol de una mañana
de gloria y vida, paz y amor.
Libertad florece y grana
en el milagro de su ardor.
¡Libertad!

España brilla a tu fulgor
como una rosa de Verdad"
y Amor.

Gloria de escuchar
por tierra y mar
–fe y esperanza–
cantar
"España avanza".

Gloria del cantar
del campo y mar, con la armonía
sin par,
España mía.

Luz de hogar encantadora
a quien con fe la ve lucir.
Fiero incendio que devora
al que lo quiere combatir.

¡Libertad!
El mundo brilla a tu fulgor
como una gema de Verdad
y Amor.

HOY HACE NOVENTA AÑOS

Hace noventa años, el 14 de abril de 1931, España pasó de ser monárquica a republicana y, aunque en blanco y negro, las imágenes de aquel día nos hablan de un martes primaveral, con multitudes de mujeres y hombres celebrándolo con alegría en las calles. Pero ¿cómo era entonces el país que ponía su esperanza en un nuevo régimen político?

España contaba con 23.563.867 habitantes, con una densidad de 46,7 habitantes por kilómetro cuadrado (datos a 30 de diciembre de 1931 del INE), el número de mujeres superaba al de hombres, y en el año de la proclamación de la Segunda República nacieron alrededor de 653.000 personas y fallecieron cerca de 409.000.

España era entonces un país esencialmente agrícola y en muchos pueblos se vivía en situación precaria y bajo el control de los caciques. El número de empleados en esa época no llegaba a los nueve millones de personas, de las que casi cinco millones trabajaban en el sector primario, en la agricultura, la ganadería y la pesca, según el estudio de la Fundación BBVA Evolución económica de las regiones y provincias españolas en el siglo XX.

PIB marcado por la agricultura

Al comienzo de los años treinta del siglo XX, la agricultura ocupaba a más del 40 % de la población activa y el PIB, que bajó en 1931, venía marcado por la producción agraria. El economista Juan Velarde apuntaba que poco después, en 1932, el 27 % del PIB era agrícola; el 28 %, industrial; y el 45 %, de servicios.

 

En un contexto de reducción de las exportaciones y de las importaciones, el retorno de emigrantes provocaba la disminución consecuente de las remesas del exterior, además de una bajada de los beneficios empresariales.

 

En 1931, el movimiento migratorio por mar se tradujo en 67.714 salidas y 107.308 llegadas, según las Estadísticas históricas de España siglos XIX-XX, también de la Fundación BBVA, que repasa otros datos curiosos como que, según la DGT, los vehículos matriculados eran 13.375.

Un tercio de analfabetos

El analfabetismo en 1931 era habitual, afectando a un tercio de la población. La mayoría de los niños no estaban escolarizados y los alumnos de Primaria sumaban 2.879.239, el 43 % en centros públicos. Los de Secundaria eran 81.571 (68.893 varones).

Se propondría pronto el cambio a una enseñanza laica y al nacimiento de las misiones pedagógicas, que incluirían un Teatro del Pueblo y un Teatro de Guiñol.

La Segunda República impulsó también la enseñanza universitaria; en 1930 solo existían facultades en varias provincias, con alrededor de 37.000 alumnos.

El Ejército estaba formado por 175.000 soldados, para los que había cerca de 500 generales y 22.000 oficiales, es decir, un oficial por cada siete miembros de la tropa.

La cultura

Por otro lado, hace noventa años, se registraron 2.214 titulos en el Registro de la Propiedad Intelectual y los impresores remitieron a la Biblioteca Nacional 7.465 obras (datos del INE).

Los momentos de ocio en 1931 se repartían entre tabernas, tertulias, tablaos, zarzuelas, teatros, literatura, poesía, toros y fútbol.

Se admiraba a actrices y cantantes como María Fernanda Ladrón de Guevara, Aurora Redondo, Leocadia Alba, La Argentinita, las obras de los hermanos Álvarez Quintero, al tenor Hipólito Lázaro o los tangos de Gardel, a escritores como los Machado o Baroja y a los de la generación del 27.

También se seguía a los toreros Marcial Lalanda y Domingo Ortega y a los equipos de fútbol en cabeza de la Liga, el Athletic de Bilbao y el Real Madrid, que se tuvo que quitar en 1931 la palabra «real» de su nombre, pero seguía ganando partidos con Zamora de portero.

Un legado que impregnó el nuevo período democrático nacido en 1978

C. NARANJO

Con esperanza y expectación vivieron millones de españoles el 14 de abril de 1931 la proclamación de la Segunda República, de la que se cumplen este miércoles 90 años, un aniversario en el que varios historiadores han reflexionado sobre si la democracia actual se reconoce como heredera de la de entonces.