Diario Digital controlado por OJD

Lección de salud- Cómo mantener tu sistema inmune sano

Enviar a un amigo
Lección de salud-  Cómo mantener tu sistema inmune sano
23-11-2021

El Sistema inmunológico es el mecanismo de nuestro cuerpo que nos protege de todos los males que quieren a atacar nuestro cuerpo. Este sistema  impide que la mayoría de los virus y bacterias nos hagan daño. 

El sistema inmunitario se desarrolla a lo largo de varios años. Alcanza su plena madurez alrededor de los 12 años. Durante este tiempo entra en contacto con muchos agentes patógenos, que le enseñan a defenderse contra determinados virus y bacterias. Cómo será esta lucha -si será una pesada carga para el cuerpo o será casi imperceptible- depende principalmente de nosotros.

Somos nosotros los responsables de que el sistema inmunitario funcione eficazmente. Nuestros hábitos y elecciones diarias refuerzan nuestra inmunidad o la arruinan, según el experto Robert Griffith. ¿Qué puede hacer para disfrutar de una buena salud?

Evitar el estrés

Uno de los principales desencadenantes de las patologías es el estrés a muchos niveles  en el que se incluye las enfermedades sistema inmunológico. El estrés leve es una respuesta natural que podemos experimentar en algunas situaciones intensas que requieren de nuestra atención y energía y terminan sobrecargando nuestro cuerpo. Sin embargo, el estrés constante, fuerte y prolongado se cronifica lo que provoca el aumento de la corteza suprarrenal (en la que se producen las hormonas del "estrés", la principal es el cortisol), la atrofia de la glándula del timo, que es el centro de nuestro sistema inmunitario. 

Además, el estrés reduce el número de linfocitos (células sanguíneas responsables de nuestra inmunidad) en la sangre, lo que nos hace más susceptibles incluso a infecciones menores.

Una medida preventiva para reducir el estrés de nuestra vida es la actividad física. Así lo demuestran  ensayos con calificaciones altas sobre salud: cómo mejora nuestro estado de ánimo, salud mental, apariencia y condición física, y  nuestro sistema inmunológico. Lo más importante es establecer una rutina moderada de ejercicio. Lo que recomiendan los expertos en salud es realizar ejercicios 3 veces por semana, al menos 30 minutos y con 130 pulsaciones por minuto. 

Además de los ejercicios como nadar, caminar, correr, también hay otras medidas muy saludables para nuestro sistema inmunológico.

Dormir bien

Cuidar nuestro ciclo circadiano es clave para nuestra inmunidad. Se trata de tener un sueño diario de calidad, puesto que la falta de descanso, lleva al cuerpo a ser más susceptible a las infecciones. Pero ¿Qué es dormir bien? Por lo general, para los niños dormir 10 horas es suficiente y para adulto entre 7 y 9 horas es suficiente. El sueño es un descanso activo donde tu cuerpo trabaja y memoria para almacenar toda la información y los recuerdos vividos, además produce más linfocitos durante el sueño profundo y saludable.

Comer sano

Comer sano implica comer de todo de forma balanceada. La clave para una buena salud y un sistema inmune potente, es tener un intestino sano: poseemos el 80% de células inmunitarias en el intestino. El zinc es un nutriente que ayuda al sistema inmune a contrarrestar a los microorganismos patógenos, el cual lo puedes encontrar en las  carnes, pescado, legumbres, la carne, los lácteos, los huevos, los cereales integrales, las semillas de calabaza, las almendras (entre otros).

Suplementos de vitamina C y D

Las vitaminas C y D están entre las más importantes para cuidar nuestro sistema inmunitario. La vitamina C contribuye a proteger las células del estrés y ayuda al funcionamiento del sistema inmunitario. En nuestra dieta cotidiana podemos cubrir esta vitamina. Aunque crees que no lo estás haciendo procura hacerlo con un suplemento diario. 

La vitamina D, también ocupa un lugar central en nuestro sistema inmune. Su papel es ayudar al funcionamiento de los músculos, y a mantener sanos y fuertes los huesos. Su mejor fuente es la luz solar, bajo cuya influencia se sintetiza en nuestro cuerpo. Para los países con menos luz solar al año en época de invierno y otoño se recomienda incluir en su dieta un suplemento de vitamina D. 

Conclusión

El estrés se considera uno de los principales desencadenantes de patologías y problemas emocionales, además de menoscabar nuestro sistema inmunitario. Existen muchas medidas para prevenir el estrés crónico y que están al alcance de nuestras manos. 

Lo primero, es importante tomar conciencia de nuestro estilo de vida y revisar todas las dimensiones de nuestra vida. Descanso, ejercicio físico, comer bien.  Estas tres variables son la base para reducir el estrés. 

Por tanto,  fortalecer estas tres áreas de nuestra vida, hará que nuestro estado de ánimo mejore, el nivel de cortisol baje y por ende que nuestro sistema inmunológico se fortalezca, fundamental para tener una vida saludable.