Los nuevos retos de las casas de apuestas de cara al futuro próximo
16-04-2021
Las casas de apuestas se encuentran ahora mismo frente a un panorama incierto. Hasta hace cosa de un año gozaban de una salud de hierro en España. Y no solo en España. Su éxito era un fenómeno mundial. En cualquier parte del mundo, las apuestas deportivas habían estado creciendo sin parar.
No obstante, desde hace un año los problemas se les empiezan a acumular a las casas de juego, muchas de cuales puedes conocer en esta página enlazada. El confinamiento forzoso, que comenzó en marzo del año pasado y que se extendió durante tres meses, trajo consigo el cese de la gran mayoría de las actividades deportivas; y sin eventos deportivos no puede haber apuestas. Por suerte para estas compañías, el deporte volvió a abrirse paso y a ser una de las mayores opciones de ocio de la sociedad actual. Pero gran parte del daño ya estaba hecho, puesto que la facturación de las casas de apuestas cayó en picado durante esos tres meses de parón deportivo. Además, recuperar las cifras previas iba a ser una tarea complicada.
La nueva legislación sobre el juego y los retos del futuro
Las malas noticias de este sector no se han quedado en el drástico descenso de usuarios, sino que la antigua Ley del Juego, promulgada en 2011 —hace ya una década—, ha sido reformada. El cambio de equipo de gobierno trajo consigo cambios legales, si bien es cierto que esta ley ya había estado en el ojo del huracán durante anteriores mandatos, en especial porque la ley de 2011 resultaba incompleta y no se pronunciaba en determinados aspectos como, por ejemplo, en lo referente a la publicidad.
Así pues, el Ejecutivo acabó por aprobar la nueva reforma de la Ley del Juego, una reforma que presenta grandes restricciones a las casas de apuestas en materia publicitaria. Con la aprobación del texto legal, las casas de apuestas no podrán, sin ir más lejos, anunciarse libremente a cualquier hora ni en cualquier medio, no podrán firmar acuerdos de patrocinio con clubes o eventos deportivos, no podrán utilizar figuras públicas para sus campañas publicitarias… En definitiva, un duro palo para un sector que no vive su mejor momento, ya que la inversión publicitaria es uno de los pilares sobre los que se asienta el éxito de estas empresas. Solo hay que echar un vistazo a cualquier retransmisión o programa deportivos: en cada corte publicitario proliferan los anuncios de estas compañías de juego.
Por lo tanto, el futuro plantea nuevas dificultades y nuevos retos que las casas de juego deberán superar como de costumbre. La cuestión no es saber cuáles han sido las casas de apuestas que más han crecido en 2020 y cuáles serán las que más lo hagan en este 2021, sino averiguar cómo será el panorama en un futuro próximo. A su favor juega el hecho de que se trata de empresas que han sabido adaptarse a cualquier circunstancia y que están acostumbradas a identificar oportunidades de negocio y a aprovecharlas. No puede ser de otra manera en unas organizaciones que han crecido tanto en un espacio de tiempo tan corto.
Y todo esto también dependerá en gran medida del rumbo que tome el deporte actual, en un contexto en el que no hay nada claro a día de hoy. Sea como fuere, a las casas de apuestas no les queda más remedio que tratar de buscar soluciones.