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¿Por qué a los españoles nos cuesta tanto aprender inglés?

En un mundo globalizado como en el que vivimos hoy día, dominar el inglés se presenta como una de las herramientas principales para, prácticamente, cualquier futuro laboral

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¿Por qué a los españoles nos cuesta tanto aprender inglés?
25-11-2019

A.R.C

En la clasificación de nivel de inglés, los españoles seguimos en las últimas posiciones entre los países que conforman Europa. Así lo dice el último ranking mundial de Education First English Proficency. En esta tabla, España aparece junto con Italia, Albania o Bielorrusia como naciones con peor dominio del inglés en todo el continente, una tendencia que se ha mantenido en el tiempo y que se ha convertido ya en un cliché, un tópico de que es difícil escapar: los españoles no saben inglés.

En un mundo globalizado como en el que vivimos hoy día, dominar el inglés se presenta como una de las herramientas principales para, prácticamente, cualquier futuro laboral. Cada día, miles de españoles se apuntan a clases de inglés y se imponen como reto dominar el idioma. Los hay que incluso toman la iniciativa de contratar un curso de inglés en Inglaterra, un campo en el que los cursos de Where&What son de los más demandados.

Estudiar inglés en Reino Unido supone dar un impulso al aprendizaje del idioma, puesto que estudiante no solo deberá utilizarlo mientras dure el horario de la clases, sino también en la calle, en los comercios, para socializar e interactuar con el entorno en cualquier aspecto. Aprender inglés en Inglaterra es una vía más efectiva que hacerlo con un número determinado de horas a la semana en casa. Los resultados del "trabajo de campo" son mayores también cuando se trata de estudiar un nuevo idioma.

¿Por qué nos es difícil aprender inglés?

El hecho de que España aparezca en los últimos puestos en cuanto a nivel de inglés en toda Europa tiene una explicación: a los españoles nos cuesta aprender inglés. La pregunta es, ¿por qué? Existen diferentes motivos, tanto culturales como educativos de clase, además de los habituales por las evidentes diferencias entre el inglés y el castellano, tanto a nivel gramático como léxico.

El inglés en el cole, una base deficiente

Existe una corriente de opinión que critica el enfoque educativo que se da al inglés tanto en colegios como en institutos. Esta línea de pensamiento asevera que la educación pública no ha sabido idear un sistema o un programa escolar que haga que los más pequeños adquieran un nivel suficiente de inglés al terminar su etapa en primaria o secundaria. 

Se dice que el problema principal radica en que se prioriza la teoría por encima de la práctica cuando, según los defensores de esta teoría, es la práctica la que realmente estimula el aprendizaje del idioma inglés.

Confianza ciega en cursos "milagro"

¿Quién no ha escuchado o leído alguna vez el típico reclamo "aprende inglés en 15 días"? La publicidad y el marketing de los cursos de idiomas trata de vender un aprendizaje máximo en el menor tiempo posible. Es decir, plantear un objetivo poco realista que lleva al potencial estudiante a plantearse metas difícilmente alcanzables y, en consecuencia, a desistir al poco tiempo de comenzar con sus clases.

La realidad es que estudiar y aprender un nuevo idioma, incluido el inglés, es un proceso basado en metas a corto plazo para caminar con paso firme. Expertos recomiendan acudir regularmente a clases e, incluso, viajar a países anglosajones donde poner en práctica lo aprendido y asimilar más vocabulario y gramática con los propios británicos como fuente de conocimiento.

Poca paciencia y desconocimiento de recursos

Cuando alguna tarea se vuelve difícil, suele acabar siendo algo tedioso y por lo que se pierde el interés. El inglés no es una excepción. Los casos de estudiantes que, por falta de voluntad o de tiempo, han abandonado su objetivo, son aquellos que tienen poca paciencia o una baja tolerancia a la frustración inicial típica del comienzo de cualquier estudio. Esto puede venir dado por múltiples factores entre los que destaca la escasa o nula diversión.

Cuando la lucha por un objetivo termina por ser un quehacer que molesta en el día a día, esto es sinónimo de que el estudiante no disfruta del aprendizaje del idioma. Por ello, conviene buscar alternativas que conviertan el estudio en algo atractivo. Una iniciativa que ha ganado peso en los últimos años es ver películas y series en Versión Original con subtítulos. De esta forma, se estimulará la capacidad de escucha y de atención en los diálogos, beneficiando así al estudiante al tiempo que hace algo que le gusta.

Estudiar inglés en Reino Unido, una opción apetecible

Como se ha comentado con anterioridad, marchar al extranjero para aprender o reforzar los conocimientos en el inglés conlleva grandes beneficios en lo que al dominio del lenguaje se refiere. Cuando el idioma es el único vehículo de comunicación, se refuerza la atención en su estudio y asimilación para interactuar más y mejor con el entorno. Por ello, la oferta de cursos en Reino Unido ha aumentado considerablemente en los últimos años.

Existe una gran variedad de ciudades británicas con escuelas para extranjeros donde recibir clases de inglés a diferentes niveles. Londres, Manchester, Liverpool, Cambridge y Oxford, o incluso ciudades más pequeñas como Stirling, Torbay, Porstmouth o Bath. Destinos angloparlantes dónde el estudiante puede encontrar cursos que marquen un antes y un después en su nivel de inglés.