Julio Neira no alcanzó la presidencia en 1995 al pactar Ángel Agudo con el PP-PRC
Fallecido el sábado a los 68 años, a él se debe el primer tratado universitario sobre los problemas de la edición crítica de la poesía española contemporánea y ha sido un reconocido especialista en la edición de epistolarios entre poetas contemporáneos.
08-05-2022
Julio Niera Jiménez fue el candidato del PSOE en las autonómicas de 1995. Fue investido en segunda votación presidente de la Comunidad Autónoma Martínez Sieso, después de llegar a un acuerdo de abstención con Ángel Agudo, líder entonces de IDECAN, partido surgido de una escisión del Partido Comunista de España. Aunque Neira contaba con 17 escaños para su elección, la negativa de Agudo fue clave para que no saliera presidente con 20 escaños, la mitad más uno de la Cámara. Días después, con los votos del PP-PRC Agudo lograba la presidencia de la Comisión de Economía. La curiosidad política señala que años después Ángel Agudo llegó a presidir el PSOE a pesar de negarle los votos a Julio Neira. Otro capítulo de la política en Cantabria.
FALLECIMIENTO
El sábado,7 de mayo, falleció en Málaga Julio Neira Jiménez (Madrid, 1954) a los 68 años de edad a causa del cáncer que padecía. Vinculado a Cantabria a través de su matrimonio con una hija de Manuel Arce, fue candidato autonómico del PSOE en las elecciones de 1995, además de director provincial de Educación durante varios años. Como portavoz socialista en la legislatura, participó en la reforma estatutaria de 1998 que se logró a través del conocido por "pacto de Carmona". De esta comisión estatutaria han fallecido ya Rafael de la Sierra, Martín Berriolope y ahora Julio Neira.
Según informa el diario Sur, de Málaga, sus restos mortales han siendo velados a lo largo de la tarde de ayer y este domingo, a las 11 horas, se ha oficiado un funeral civil.
Julio Neira era Catedrático de Literatura Española y Teoría de la Literatura en la UNED –de cuya Facultad de Filología fue decano entre 2015 y 2019–, desarrolló primero en Málaga y después en Andalucía una intensa actividad relacionada con la política cultural, en la que se había iniciado en los años ochenta en Cantabria y después en Madrid con diferentes gobiernos socialistas.
Entre 2003 y 2008 fue director del Centro Cultural Generación del 27 de la Diputación de Málaga. Entre 2008 y 2011 fue coordinador general del Centro Andaluz de las Letras, hasta que en febrero de ese año se hizo cargo de la Dirección General del Libro, Archivos y Bibliotecas de la Junta de Andalucía, puesto que ocupó hasta junio de 2012.
Julio Neira dedicó su actividad docente e investigadora al estudio de la poesía española contemporánea, en especial a la Generación del 27. Publicó diversos libros y numerosos artículos en las principales revistas de la especialidad y en volúmenes colectivos también sobre Rafael Alberti, Vicente Aleixandre, Jorge Guillén, Luis Cernuda, Gerardo Diego, José María de Cossío, Blas de Otero o José Hierro.
Edición crítica
A él se debe el primer tratado universitario sobre los problemas de la edición crítica de la poesía española contemporánea y ha sido un reconocido especialista en la edición de epistolarios entre poetas contemporáneos. También participó y dirigió numerosos cursos, seminarios y congresos del ámbito de su especialidad en universidades españolas y extranjeras.
Entre sus últimos libros publicados se encuentran 'Manuel Altolaguirre, impresor y editor', (2008), 'La quimera de los sueños. Claves de la poesía del Veintisiete' (2009, 'Historia poética de Nueva York en la España contemporánea' (2012), 'Trasluz de vida. Doce escorzos de Gerardo Diego' (2013), Memorial de disidencias. Vida y obra de José Manuel Caballero Bonald' (2014), 'De musas, aeroplanos y trincheras. Poesía española contemporánea' (2015) o su reciente 'Estudios sobre la poética y la narrativa de Rafael Ballesteros' (2020).
REACCIONES
El poeta Antonio Jiménez Millán se mostraba la noche del sábado desolado por su muerte: “Julio Neira fue un amigo y colega muy cercano. Teníamos la misma edad (nacidos en 1954) y una trayectoria profesional parecida. Los dos trabajamos sobre la Generación del 27 y siempre le agradeceré que contara conmigo cuando fue director del Centro del 27 y luego del CAL: gracias a él fui comisario de la exposición y el catálogo de Antonio Machado. Yo le iba a presentar su último ensayo sobre Caballero Bonald, pero no se sintió con ánimos de hacerlo. Una terrible pérdida”.
Según otra buena amiga, la poeta Aurora Luque, “reunía cualidades que rara vez se dan juntas: rigor intelectual como investigador y respeto amoroso hacia la poesía (son notables sus ediciones de poetas del 27; me quedo con su Jacinta de Moreno Villa) junto a una admirable capacidad de gestión cultural y un sentido de la política noble y realista a la vez. Su última entrada en Facebook lo dice todo: el 14 de abril compartió un artículo de Juan José Téllez sobre los peligros de la ultraderecha. También dice mucho de su flexibilidad y curiosidad intelectual el que últimamente se dedicara a estudios de literatura y género. Compartimos inolvidables viajes literarios: en febrero de 2009 visitamos en grupo la tumba de Machado en Collioure. Fue un amigo leal, afectuoso y divertido. Lo querremos siempre”.