Recuerdo y homenaje al gran ciclista Vicente Trueba en el XXXV aniversario de su muerte
Con asistencia del alcalde de Riotuerto, familiares y miembros de la Asociación de Amigos del Ciclismo de Cantabria.
11-11-2021
De izquierda a derecha., Amado Zabala, Salvador Lavín, Roberto Noriega, Beatriz e Irene Ruiz Lavín, Lucas Mier Arronte, Alfredo Madrazo Maza y Cipriano Higuera
Ayer, 10 de noviembre, con motivo de cumplirse 35 años del óbito del insigne ciclista cántabro, español y universal, don Vicente Trueba Pérez, honrosa y universalmente denominado la Pulga de La Montaña, o de Torrelavega, indistintamente, cuyos restos mortales descansan, junto a los de su esposa doña Josefina Bedia Canales, en el monumental cementerio de La Cavada, la Asociación Museo Vicente Trueba de Torrelavega y Amigos de Vicente Trueba y del Ciclismo Cántabro, juntamente con el Excmo. Ayuntamiento de Riotuerto, rindieron homenaje al que en el Tour de Francia del año 1933, y corriendo solo, “Touriste Rutier” fue indiscutible héroe y 1er Premio de la Montaña; coronando solo en 9 de los 15 puertos puntuables: ( Ballon d´Alsace, Galibier, Vars, Braus, Port, Peyresourde, Aspin, Tourmalet y Aubisque).
Primer Premio de la Montaña creado en su honor en aquella edición de 1933, a consecuencia de los méritos y cualidades que Vicente Trueba había demostrado en las montañas del Tour, el año anterior. Honra, reconocimiento y orgullo de La Montaña, de España y del Ciclismo Universal.
Sobre el monumento a él erigido en La Cavada, el alcalde y primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Riotuerto, señores Alfredo Madrazo Maza y Lucas Mier Arronte, así como Irene y Beatriz Ruiz Lavin y Salvador Lavín Carral, en representación de la familia del homenajeado, y en la del Museo y de los Amigos de Vicente Trueba y del Ciclismo Cántabro, Cipriano Higuera Abascal, Amado Zabala Santamaría, Diego Noriega Rebolledo y Roberto Noriega Peláez, depositaron un ramo de flores y un sencillo cartel evocador de su memoria. Finalmente, subiendo al cementerio, y ante los nichos en los que yacen los restos mortales de Vicente y de su esposa, Josefina Bedia, cerraron el acto de homenaje rezando un Padre nuestro por su eterno descanso.