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Se desvela que el piloto cántabro falleció en el acto y que el equipo médico intentó sin éxito reanimar al copiloto

LOS CADÁVERES de Jaime Gil (39 años) y Diego Calvo (30 ), trasladados a Cantabria. Los conocedores de este deporte consultados, achacan el accidente a la mala fortuna o a un posible fallo de los sistemas de seguridad del vehículo.

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Se desvela que el piloto cántabro falleció en el acto y que el equipo médico intentó sin éxito reanimar al copiloto
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FOTO LA NUEVA ESPAÑA

Jaime Gil (39 años) y Diego Calvo (30) perdieron la vida al chocar contra el guardarraíl y derrapar a mitad de la bajada del alto del  Fito Norte. La imagen que hemos rescatado del diario asturiano La Nueva España refleja la gravedad del accidente que costó la vida al piloto y su copiloto en el Rallye Villa de Llanes celebrado este sábado.

El piloto cántabro Jaime Gil y su copiloto Diego Calvo, disputaban la Copa Marbella en el Rally Villa de Llanes. El Seat Marbella que conducían se estrelló contra un puente de piedra.

El accidente, que dejó consternados y conmocionados a todos los participantes, se produjo en la séptima especial del rally, cuando la pareja de deportistas cántabros completaba la segunda pasada por L'Altu del Fitu y faltaban solo otras tres especiales para la conclusión de la prueba.

TRASLADO A CANTABRIA DE LOS CADÁVERES. Desde Llanes (Asturias) han sido trasladados a Cantabria en un furgón los cadáveres del piloto y copilito fallecidos el sábado en el Rallye de Llanes. Se ha sabido que el piloto falleció en el acto y que se intentó reanimar al copiloto pero sin conseguirlo. 

LA VOZ DE ASTURIAS AVANZA QUE SE INVESTIGARÁ EL SUCESO

 

Nadie se explica cómo pudieron fallecer Jaime Gil Vitoria y Diego Calvo tras impactar su Seat Marbella contra un guardarraíl en la bajada del Fito hasta Colunga en el que era el séptimo tramo de la 44 edición del rali Villa de Llanes. Ni miembros de la organización ni varios de los pilotos participantes, que vieron el vídeo del accidente, se explican lo sucedido. Todos lo achacan a la mala fortuna e incluso se apuntó la posibilidad de que fallaran los sistemas de seguridad de dentro del habitáculo del vehículo.

 

Según testigos presenciales del accidente, tras el impacto nadie pensaba en el fatal desenlace, cuando de inmediato acudieron a socorrer a los pilotos y se encontraron con los dos deportistas muertos, información que recogemos de La Voz de Asturias.

Tal como se puede apreciar en el vídeo de un aficionado que corrió como la pólvora en las redes sociales, se observa cómo el vehículo sale de una curva de izquierdas para afrontar una pequeña recta antes de negociar una curva de derechas larga, el Seat derrapa, el piloto no lo puede controlar e impacta con la parte trasera izquierda contra el guardarraíl. Es cierto que es en bajada, que los coches alcanzan una velocidad importante y que el Marbella es un vehículo pequeño y endeble ante un impacto como este.

 

Un destacado comisario asturiano consultado por este periódico, tras visualizar en varias ocasiones el video, manifestó que «con las barras antivuelco en buen estado, los cinturones de seguridad perfectamente anclados y en buen uso, aparentemente el impacto no parece tan fuerte como para que perdieran la vida los dos integrantes del equipo». «Hubo muy mala suerte» se lamenta.  Ahora serán las autoridades, junto a los comisarios de la carrera, quienes abrirán una investigación para determinar las causas del accidente. En la sede central de la organización en el Casino de Llanes, todo eran lamentaciones, mientras que miembros de la federación asturiana y española de automovilismo y miembros de la Guardia Civil cambiaban impresiones sobre el luctuoso suceso.