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Alcalde, ¿dónde está mi Lamborghini?

Por JORGE PALENCIA

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- ¡Anacleto! Llevas fumando 30 años ¡ya podías tener un Ferrari!

- Pues tú nuca has fumado y… ¿dónde está tu Ferrari Crescencio?

Según la plataforma de ahorro Raisin mantener a un hijo desde que nace hasta que se va de casa se ha encarecido un 41% en los últimos 20 años. Se tasa en una media de 309.381,55€ si es un niño y 301.154,02€ si es una niña (ellas se van antes de casa).

Es de suponer, no lo dice el estudio, que a más hijos será más barato porque hay gastos comunes, pero uno no puede dejar de preguntarse dónde está mi Ferrari. Mi Ferrari, mi Bugati y mi Lambo.

En 1940 el número de hijos por mujer era de 4, cuando yo nací en los 70 era de 3 y eso no era ni siquiera Familia Numerosa, no lo fue hasta 1994. El cuarto hijo varón elegía destino en la mili y el quinto se libraba. Hoy estamos en 1,19 hijos por mujer.¡1,19!

La Familia Numerosa existe como como figura legal desde 1941 (recordemos, con 4 hijos por mujer) y tanto en dictadura como en democracia el legislador ha considerado que es una figura a proteger.

Hace décadas tener muchos hijos era imprescindible, había que trabajar el campo, cuidar las vacas, las niñas mayores se ocupaban de los pequeños, tampoco había educación sexual, ni anticonceptivos, el nacionalcatolicismo lo impregnaba todo. Aun así, se fomentaba la natalidad con el conocimiento de la prosperidad futura que genera.

Hoy el panorama es desolador, solo un 8,5% de las familias son numerosas y entre ellas ya se incluyen las monoparentales con dos hijos o dos hijos con discapacidad. Uno de cada tres niños crece ya sin hermanos y cada vez son más las parejas que no tienen hijos por decisión propia.

Mi generación ha crecido alarmada por la posibilidad de no acceder a la pensión cuando nos toque, la de mis hijos directamente ni se lo plantea. No hay mes que no veamos por algún sitio la pirámide poblacional invertida que nos alerta de como estaremos en 2050. Aun así, seguimos sin políticas que faciliten el acceso de los jóvenes a la vivienda o empleos dignos y estables que les permitan hacerse su proyecto de vida. Así, la edad media en que las mujeres tienen su primer hijo es a los 30 y los hombres a los 33,3.

Pero lo que siempre ha habido son ayudas a las familias numerosas y estímulo para serlo, y cada vez con una cartera más amplia. No recuerdo gobierno que no haya ampliado las coberturas.

No es obligatorio, ser Familia Numerosa es una decisión libre, pero sabes que renuncias a muchas cosas, si sales a comer fuera no lo haces con 100€, ir al cine 80€ con palomitas y cola-loca, por lo que te cuesta una semana en Almería con los cinco una pareja se va a las Maldivas. Necesitas un piso de al menos 3 habitaciones, un monovolumen, etc., etc., etc.

Las ayudas a las Familias Numerosas son estímulos a la natalidad, no se trata de que el estado mantenga a los hijos de las familias que no los pueden mantener, para eso hay otro tipo de ayudas. Nadie tiene más hijos por las ayudas y las ayudas jamás cubren los gastos que suponen. Son un estímulo para un fin, lo mismo que el plan E para el cambio de coche, las ayudas para cambiar las ventanas por eficiencia energética, al que monta una empresa, el primer año de autónomo, etc.

Tener ese catálogo de ventajas nos anima a muchos a atrevernos y tirarnos a la piscina de algo cada vez más difícil que necesita mucha conciliación, mucho dinero y que causa muchas renuncias.

Así, el Estado y las CCAA bonifican un 50% los estudios universitarios de los hijos de Familias Numerosas, el transporte público, por tren, barco y avión, hay conciertos con empresas de autobuses, 50% en impuesto de matriculación de vehículos, bonificación en la seguridad social de cuidadores si trabajan los dos cónyuges, 1.200€ al año de ayuda por hijos hasta ciertas edades, entradas para museos, visitas culturales, bono social de la luz y el gas. Algunos ayuntamientos bonifican el IBI hasta un 90% y un 50% agua y basuras.

¿Si no hubiera estas ayudas no lo podríamos pagar? Seríamos unos inconscientes si tuviéramos hijos sin tener claro que les fuera a faltar de nada. Pero lo mismo que el que cambia de coche también podría pagarlo o el que cambia las ventanas o el autónomo que empieza.

Esto son estímulos para que lo hagas, para que si querías hacerlo y dudabas sepas que tienes toda esa serie de ventajas.

Pero claro, todo eso tiene que tener una seguridad a largo plazo porque los hijos son para siempre. No pueden estar al albur del político de turno, ha de ser una política de país.

Sería tremendo que llegara un “tronao” al Ministerio de Universidades o al de Cultura, o a Transportes y decidiera, por su mano mayor, sin criterio de partido ni política de país, eliminar unas ayudas que si algo parece evidente es que se deben aumentar y no disminuir.

Totalmente absurdo también es vincularlas a la renta porque eso es, en la práctica, eliminar el título de Familia Numerosa. Esas ayudas no son un subsidio. A los empresarios no les pedimos su declaración de la renta cuando se subvenciona un tipo de contratación determinada, ni miramos los bienes del que tiene descuento por la compra de un coche eléctrico. Son ayudas por el hecho de serlo, ayudamos a las familias numerosas porque queremos que haya más, porque la tasa de reposición es de 2,1 hijos por mujer y estamos casi en la mitad, queremos nuevos trabajadores, cotizantes que paguen las pensiones futuras, más niños, más ciudadanos.

Quien necesite subsidios que los obtenga, ese es otro debate donde cada quien tiene su opinión. Si el IBI estaba bonificado al 50% y se sube al 90% para Familias Numerosas que además tienen bajos recursos a mí me parece genial, pero las Familias Numerosas no somos subsidiados. Hemos tomado una decisión individual que beneficia al conjunto y el Estado la apoya, la fomenta y la estimula.

Por todo esto no tiene ningún sentido que un regidor municipal se atribuya la superioridad moral de que su opinión esté por encima de una estrategia de país y de unas políticas (de las pocas que quedan) que tienen el consenso unánime de todos los partidos.

Hay ayuntamientos que nunca han tenido estas ayudas y otros que las están quitando o limitando porque tienen este tipo de alcaldes.

La soberbia es una discapacidad que afecta a pobres infelices mortales que se encuentran de golpe con una miserable cuota de poder”. José de San Martín

En Santa Cruz de Bezana el acalde, Alberto García Onandía (PSOE), y su equipo de gobierno vincularon la bonificación del IBI de las familias numerosas a la renta y al valor catastral.

En ese mismo acto bajaron el coeficiente del IBI para todos los vecinos sin ningún tipo de distinción en torno a un 5%.

En una explosión de populismo barato tenemos que escuchar que ÉL no bonifica a ricos y que en realidad ha aumentado la bonificación para aquellos que realmente lo necesitan. Todo esto en la misma votación que se baja el IBI a sí mismo y al más rico del pueblo.

Los baremos puestos en la ordenanza son completamente ridículos hasta el punto que gente que tiene derecho por bajo nivel de renta a la ayuda familiar de 465€ puede no tenerlo a la bonificación del IBI.

Pero da igual, no entiende el concepto de Familia Numerosa, no sabe por qué son esa ayudas, no es consciente de que una Familia Numerosa vive en un piso de 3 habitaciones mínimo y que por tanto 100 metros entre 5 personas es mayor estrechez que 80 entre 3 y no debes pagar más IBI porque no vives mejor.

No se plantea que los hijos se hacen mayores y que a lo mejor trabajan un par de meses en verano en un bar o una tienda para ayudar en casa o para sus gastos y que eso no puede implicar el tener acceso a una ayuda o no, una ayuda QUE ES POR SER Familia Numerosa, no por cumplir el nivel de renta que considere cada cual.

Vivimos en una época mucho más individualista donde cada cual mira lo suyo, donde los subsidios, las ayudas, las subvenciones están cuestionadas, donde el populismo y la demagogia de eslóganes simples triunfan ante hechos y políticas que requieren de una argumentación más larga y farragosa.

Pero hay que ser consciente que ese populismo puede calar en quienes no están afectados por el hecho en cuestión. Los afectados, cuando estamos informados, a lo mejor lo vemos de otra forma y, en un momento dado, las Familias Numerosas, o cualquier otro colectivo tiene, si se unen, la capacidad de poner o quitar a quien haga políticas manifiestamente injustas que les perjudiquen.

Este tipo de actuaciones no parece que se vayan a extender a otras administraciones, sería un cambio de paradigma sobre el propio concepto de Familia Numerosa. La soberbia es hija de la ignorancia y afortunadamente en administraciones superiores están más claros los conceptos.

De todos modos, ante esa posibilidad uno no puede evitar preguntarse… ¿Dónde está mi Lambo?

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