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Orquesta sinfónica de la Región de Murcia

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Orquesta sinfónica de la Región de Murcia
19-05-2024

Por CLAQUETA

Titulo: “ORQUESTA SIFÓNICA DE LA REGIÓN DE MURCIA”

Género: Concierto sinfónico

Director: Michal Nesterowicz

Solista: Michael Barenboim (Violín)

Programa: “Tres piezas estilo antiguo de, Gorecki; Concierto en Re Op 35 para violín de, Kormgold y Sinfonía Nº 7 de, Dvorack

Sala: Argenta

Critica: Sana envidia, si es que es un concepto valido, lo que produce escuchar a una muy buena orquesta, de una comunidad uniprovincial, como la nuestra.

Dicho esto, asistimos a un concierto, no sé,  él porque, poco conocido, pero realmente brillante, con un director y un solista, que comparten categoría y juventud; el polaco, Michal Nesterowicz y el violinista, Michael Barenboim. No lo podemos confirmar, pero nos dicen, es hijo del gran Daniel Barenboim. Con estos mimbres sinfónicos, la velada musical tenía que responder. Y con estas dos estrellas internacionales, al frente, el reclamo superior se confirmaba.

El concierto se inició con las piezas de Gorecki. Una delicia de expresión de la cuerda, en su conjunto. Le siguio el “Concierto en Re, Op35, para violín y orquesta de Korngold. Un compositor, niño, prodigio, judío, nacionalizado Norte americano y triunfador en Hollywood, creador de óperas y un pianista virtuoso. El concierto, curiosamente de violín, le ha dado réditos importantes. En el que el instrumento solista se impone a la formación orquestal. A pesar de su intensidad, que muchas veces se resaltan. Otras interpretan el papel de acompañante, en segundo plano. Un violinista Barenboim que concita en una sola expresión técnica y talento creativo. Al que se le abre un futuro, en muchos casos ya presente, de constatación internacional, para quedarse.

La fuerza expresiva de Barenboim, unido al bien hacer de Nesterowiez, supusieron, que ambas fuerzas artísticas, nos regalarán, una sugestiva interpretación, de una música, que descubrimos, la garra que tiene. 

Otro aspecto destacable de la pieza de, Korngold, es la demostración de que el autor checo ha sido un músico del cine americano. Sobre todo al inicio del concierto, parece, la banda sonora de un melodrama de Hoyiwood.

Una segunda parte, con compositor de la misma nacionalidad, Dvorak. No es la “Sinfonía del Nuevo Mundo”, Pero este autor por mucha importancia, que para la historia de la música, tenga la citada; La Séptima,  que nos ha ofrecido la orquesta murciana, no le va la zaga. Su presencia cromática, la fuerza narrativa protagonizada por los diferentes instrumentos,  nos lleva, con fuerza a un mundo intenso.

El director polaco, acostumbrado a las orquestas de gran renombre, así como formato, llevo en volandas  a una orquesta, no excesiva de, 49 músicos, todos sus integrantes. Para  sacar la máxima expresión acústica y estética.